Oxfam Internacional y Scarlett Johansson se separan por Sodastream. La actriz ha decidido dejar de colaborar con la ONG por su desacuerdo con el spot que ha protagonizado.
La actriz Scarlett Johansson alcanzó la fama hace años gracias a su espectacular belleza angelical que la ha llevado a ser elegida la mujer viva más sensual después de siete años por Esquire, y por la que todas las firmas la quieren en sus campañas publicitarias, pero por desgracia la última que ha protagonizado no le ha traído más que quebraderos de cabeza.
Por si fuera poca la polémica que suscitaron las fotos sin ropa robadas de su móvil el pasado 2011, en esta ocasión el escándalo ha venido por su reciente colaboración con la marca Sodastream, una empresa que fabrica máquinas para hacer refrescos en nuestra propia casa.
Resulta que dicha empresa tiene su fábrica en Cisjordania, territorio ocupado por Israel pero que no pertenece a la soberanía israelí ni a ninguna otra, por lo que se ahorra gastos de alquileres, impuestos, etc., una de las ocupaciones consideradas ilegales contra las que Oxfam Internacional lleva luchando durante años, motivo por el cual Scarlett Johansson ha decidido dejar de colaborar con sus 100.000 dólares anuales para la ONG, según un comunicado por «una diferencia fundamental de opinión».
La Organización por su parte ha admitido este cese de la colaboración por parte de la actriz con otro comunicado:
«Oxfam ha aceptado la decisión de Scarlett Johansson de dejar de ser embajadora internacional de la organización tras ocho años de colaboración. Desde Oxfam, le agradecemos enormemente toda su contribución.
Oxfam respeta la independencia de sus embajadores y embajadoras. Sin embargo, que la sra. Johansson haya aceptado ser la imagen publicitaria de la empresa SodaStream resulta incompatible con su papel como embajadora internacional de Oxfam.
Desde Oxfam creemos que las empresas que, como SodaStream, operan desde asentamientos israelís agravan la pobreza y las violaciones de los derechos de las comunidades palestinas a las que apoyamos a través de nuestro trabajo. Así, Oxfam se opone a cualquier actividad comercial que provenga de estos asentamientos, ilegales conforme al derecho internacional.
La Sra. Johansson comenzó su colaboración con Oxfam en el año 2005 y en 2007 se convirtió en embajadora internacional. Desde entonces, nos ha ayudado a dar a conocer las consecuencias de los desastres naturales, así como a captar fondos para contribuir a salvar vidas y combatir la pobreza».
A pesar de la polémica que además ha suscitado el mensaje final de “Lo siento Coca-Cola y Pepsi”, este spot se emitirá dentro de unos días en la final de la Superbowl, por lo que muchos millones de personas podrán ser testigos de ello.