Rey Don Juan Carlos: Una belga y un catalán afirman ser hijos suyos

Rey Don Juan Carlos: Una belga y un catalán afirman ser hijos suyos. Últimamente al Rey Don Juan Carlos no deja de rodearle la polémica. Según afirma Vaniatis, un catalán y una belga llamados Albert Solà Jiménez e Ingrid Sartiau, afirman ser hijos del monarca. Se conocieron el pasado sábado en Gerona, y tras comentar su situación, decidieron someterse a unas pruebas que afirmaron que son hermanos en un 91% de probabilidades. Desde ese momento los dos están convencidos que son hijos de Don Juan Carlos, ya que afirman tener pruebas fehacientes de ello. Por el momento la Casa Real no ha afirmado ni desmentido la noticia.
Tras salir a la luz la noticia de una supuesta amante del Rey, después del viaje secreto que el monarca realizó a Botswana, donde estuvo de cacería, que salió a la luz por su accidente donde se rompió la cadera, y Don Juan Carlos tuvo que pedir disculpas, ahora la polémica gira en torno a dos personas que afirman ser sus hijos.
 
Ingrid Sartiau es una belga de 46 años, que afirma que fue su madre quien le confesó quién era su padre, un día mientras veían la televisión: “Este hombre es tu padre, me dijo, cuando aparecían unas imágenes del Rey de España en una cadena belga”. Hace varios años que lo sabe, y asegura que su madre conoció a Don Juan Carlos en 1956 en Francia. Ambos se volvieron a reencontrar en 1966 y 9 meses después nació Ingrid.
 
Hace sólo unos meses que la belga empezó a investigar un poco más y encontró una entrevista a una publicación holandesa que dio Albert Solà hace unos años, y decidió ponerse en contacto con él para compartir su situación.
 
El catalán sostiene que en los años 50, durante un viaje que realizó el Rey a Barcelona desde Zaragoza, donde estaba estudiando en la academia militar, conoció a su madre, María Bach Ramon, que dio a luz en 1956 a Albert. El catalán afirma: “Poco antes de nacer yo, el Rey le comunicó la noticia a varios de sus amigos”.
 
Después del dar a luz, unas enfermeras se llevaron a Albert a Ibiza, donde residió hasta 1961, cuando regresó a Barcelona, y 3 años después fue adoptado por la familia Solà Jiménez. Cuando el catalán comenzó a investigar sobre su familia biológica, descubrió en unos papeles el término ‘chupete verde’, utilizado para los niños de sangre real.
 
“Estuve viviendo en México, volví para investigar mi adopción. Pero desde entonces no puedo salir del país, dicen que por seguridad. Estoy encerrado como en una jaula”, afirma Albert.
 
Tras conocerse, Ingrid y Albert de sometieron a unas pruebas de ADN que afirmaron que eran hermanos en un 91% de probabilidades. El doctor Cassiman, encargado de relizarlas ha declarado: “La probabilidad de que tengan un progenitor común es elevadísima. Los resultados son claros, pero los estudios no pueden especificar si es el padre o la madre. Yo no sé quién es el padre, son ellos los que dicen que es Don Juan Carlos”.
 
La Casa Real por su parte no da credibilidad a estas pruebas, y desconfía de que estos resultados sean ciertos. A pesar de ello, los dos hermanos han decidido enviar un fax al Rey para comunicarle la noticia: “Es uno de los faxes más restringidos que tiene el Rey. El fax que ella le mande, le llegará, se lo puedo asegurar”.
 
Por el momento nada es seguro, pero el tiempo dirá si estas dos personas son reconocidas como hijos del monarca o no.