Miguel Bernardeau fue el primer invitado de la semana en El Hormiguero, donde hizo repaso de su trayectoria en el ámbito cinematográfico.
El actor se sentó este lunes en El Hormiguero para hablar de su último proyecto en el mundo de la interpretación. De la misma manera, el actor valenciano acudió al espacio presentado por Pablo Motos para presentar su nuevo trabajo, Zorro, serie que ya está disponible en Prime Video. Lo cierto es que la entrevista no arrancó de la mejor forma posible, ya que se vivió un momento inédito en El Hormiguero después de que Pablo Motos sufriera una bajada de tensión, que le mantuvo fuera de las cámaras durante unos segundos.
Tras el susto que dio el presentador valenciano, Miguel Bernardeau comenzó a sincerarse y comentó algunos de los hobbies que tiene, principalmente el surf, una actividad que casi le cuesta la vida. El intérprete de Élite reveló cómo fue el accidente que tuvo realizando surf y con el que estuvo a punto de fallecer: «Fue lo más tonto que me ha pasado en mi vida y casi me mato. Fue fuerte. Cogimos grandes olas, pero luego, en el Mediterráneo, me caí de un catamarán y estuve tres horas y media en medio del mar junto a mi amigo y estuvimos a punto de ahogarnos» confesaba.
En el mismo sentido, el exnovio de Aitana explicó cuál fue el incidente que les llevó a vivir esta situación tan agónica en alta mar: «El catamarán se fue. Estábamos en un sitio en el que pasan un montón de multimillonarios con sus yates, pero no paraban. Estuvimos tres horas y media gritándoles«, recordaba con cierto estupor.
Miguel Bernardeau llegó a recordar la sensación que tuvo en un momento de máxima ansiedad ante la amenaza de perder su propia vida: «Se te empieza a cristalizar la sal en la garganta y nos dio un poco de hipotermia». Finalmente, en un momento de agobio absoluto, a Miguel y su amigo les apareció un rayo de esperanza cuando un hombre paró con su yate para rescatarles: «Se detuvo delante de nosotros para prestarnos el catamarán que se nos escapó. Nos tendió la mano y nos ofreció una copa de champán», contaba. Sin embargo, lejos de tomar champán en ese instante, Miguel reconoció pedirle agua por encima de cualquier otra necesidad.
Aun así, Miguel no le ha cogido pavor al mar y no esconde que su afición por el surf siga siendo la misma. De hecho, prueba de ello, es su perfil en Instagram, el cual está lleno de publicaciones en las que sale el propio actor con su tabla de surf y practicando su mayor afición.
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