El ex piloto alemán, Michael Schumacher, sigue siendo noticia por el fatídico accidente que sufrió esquiando el pasado mes de diciembre en los Alpes franceses en la estación de Meribel donde se encontraba con su hijo.
Poco a poco la salud de Michael Schumacher va mejorando desde el día que decidió escoger como destino de sus vacaciones de Navidad la montaña. El estado del piloto de Fórmula 1 ha sido muy grave e incluso hubo momentos donde se llegó a temer por su vida.
Corinna, la mujer de Schumacher ha estado al pie del cañón desde el primer momento. Desde que el piloto estuvo preparado para despertar del coma inducido hasta su traslado desde el hospital de Grenoble hasta otro en Lausana, más cerca de su casa.
Ahora comienza una dura etapa en la vida de ambos, la recuperación lenta del piloto, pero al menos su mujer, no desiste en el intento. En el hospital CHUV de Lausana (Suiza) han hecho unas bonitas declaraciones: «En su habitación lo hemos visto sonreír. Corinna, su mujer, ha colocado ante él objetos conocidos, fotos de familiares, así como de eventos que han marcado su vida de esposo y de piloto», demostrando así el empeño de Corinna para que su marido se recupere. «Es una persona sencilla, notable, luchadora y, como pareja, tienen una relación fuera de lo común”.
Desde el pasado 16 de junio se encuentra en la unidad de neuro-rehabilitación aguda y según los médicos que lo tratan está en «estado de consciencia mínima». La nueva fase de rehabilitación podría durar entre tres meses y dos años.
Pero, ¿qué debe conseguir el hospital para que se produzca esta rehabilitación? El objetivo final es reconectar al paciente con el entorno, estimular los cinco sentidos, la motricidad y la actividad cerebral. Pero no sólo eso, deben atender también al lenguaje y la capacidad de reacción e interacción con otras personas.
Aunque se trata de un duro trabajo, la familia no se ha desanimado en ningún momento y acude todos los días al hospital, en especial su mujer Corinna. Además, hay también buenas noticias desde el centro hospitalario: «Parece ser que Michael no está paralítico, que no está afectado a nivel de motricidad».