La influencer Laura Escanes ha denunciado en redes sociales que alguien ha difundido fotos falsas de ella desnuda, generadas con Inteligencia Artificial.
La Inteligencia Artificial (IA) parece estar totalmente integrada en nuestras vidas. Esta tecnología es cada vez más sofisticada y accesible para todos aquellos que quieran usarla. Pero, aunque ha sido creada para mejorar la vida digital de usuarios y trabajadores, a veces su uso es malintencionado. Es el caso del deep fake, una técnica de edición hiper realista de vídeos y fotografías, que busca el engaño y la confusión del usuario final. Hace unos meses Rosalía denunciaba en redes haber sido víctima de esta técnica, ahora le ha tocado el turno a Laura Escanes.
La influencer anunciaba hace apenas una semana que dejaba a un lado el mundo digital para disfrutar y relajarse junto a su hija Roma. «Hace unos años me dije a mí misma que lo iba a hacer mínimo una vez al año y ahora ha llegado el momento. Todo está bien, no hay que preocuparse de nada. Pero me apetece centrarme en mí, sin más. Os quiero”, compartía la catalana con una bonita foto. Pero lamentablemente no ha podido ser así.
Unos días después, volvía a Instagram de la misma forma en la que se despidió, con una historia de apenas 15 segundos en la que contaba que su imagen estaba siendo utilizada, sin su consentimiento, para vender determinados productos. Laura interrumpía así sus vacaciones con la pequeña, para expresar su molestia y asegurar que «tomará las medidas necesarias para que se eliminen esas informaciones».
Pero esto no ha sido todo, ya que parece que alguien se empeña en amargar la desconexión de la modelo. En cuestión de horas, Escanes volvía a publicar una historia denunciando ser víctima del deep fake. «Me ha llegado un link donde hay fotos mías desnuda editadas y creadas por IA», lamentaba.
Unas imágenes que le han causado una gran impresión y le han hecho estallar. «A parte de sentirme totalmente utilizada y expuesta, hay algo que hace que me hierva la sangre. El cuerpo de una mujer no se utiliza. Ni para el placer, ni para abusar ni para manipular. Me repugna la persona que las haya creado, pero también los que están ahí y les parece divertido y callan».
Inmediatamente la influencer ha recibido el apoyo público de numerosos rostros como el del Maestro Joao, el de Ángela Rodríguez, secretaria de Estado de Igualdad y contra la Violencia de Género, o el de StopNCII.org, la web encargada de eliminar el rastro de fotografías íntimas modificadas por IA.
Otros sin embargo han minimizado los daños e incluso cuestionado sus palabras. Afortunadamente Laura no se ha quedado callada y ha sabido defenderse muy bien: «Si me quiero desnudar me desnudo yo. A ver si lo entendemos».
Una vez más el uso malintencionado de la IA vuelve a salir a la palestra. Hace apenas un par de meses Rosalía denunciaba esta misma práctica tras la difusión, por parte del cantante JC Reyes, de fotos falsas donde ella aparecía desnuda. La fotografía había sido modificada por el reguetonero para conseguir visitas a costa de la artista.
El caso de la estrella levantó un gran revuelo que todavía hoy perdura. Para algunos el avance de la IA harán de esta práctica algo común. Para otros el mal uso de la tecnología, unido a la falta de educación y al machismo. Pues como siempre las más expuestas y perjudicadas parecen ser las mujeres.
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