La Casa Real de Dinamarca ha querido aparentar normalidad con la reaparición navideña de los herederos a la corona danesa, Federico y Mary.
La Casa Real danesa quiere dejar atrás el ‘affaire Genoveva’ cuanto antes. De ahí que haya querido aprovechar una estampa típicamente navideña para lucir unidad familiar entre Federico y Mary de Dinamarca, los herederos a la corona del país del norte de Europa.
Comencemos por el principio. Hace unas semanas, coincidiendo con la visita de los Reyes de España, Don Felipe y Doña Letizia, salieron a la luz unas fotos en las que se veía a Federico, príncipe heredero de Dinamarca, paseando con Genoveva Casanova por Madrid. Unas instantáneas que sacudieron a la sociedad danesa, ya que el heredero al trono danés está casado con Mary de Dinamarca con la que tiene dos hijos. Desde el primer momento, fuentes no oficiales cercanas a la familia real nórdica desmintieron cualquier tipo de infidelidad.
Ahora la Casa Real danesa ha querido dar un paso más en esa línea para seguir echando tierra encima del ‘affaire Genoveva’. Para ello, siguiendo con su afán de mostrar el lado más humano de los miembros de la familia real, han aprovechado el montaje del árbol de Navidad para lucir unidad.
Aparente buena relación entre Mary y Federico de Dinamarca
En el vídeo subido a la red social Instagram se ve a los herederos al trono danés, Federico y Mary, montando el árbol navideño acompañados de sus hijos Cristián e Isabel. En el vídeo aparece la princesa Mary sonriendo a su esposo Federico en una estampa típicamente familiar y bien avenida, lejos de cualquier tipo de discrepancia. Más aún de una sospecha de infidelidad.
Así las cosas, la familia real danesa no ceja en su empeño de lucir normalidad tras el terremoto que supusieron las imágenes del heredero acompañado de la mexicana Genoveva Casanova. Un asunto sobre el que se mantiene el silencio oficial del que únicamente se ha publicado un comunicado de prensa desde la casa real danesa en el que se aclaraba que «ni comentaban ni confirmaban detalles relacionados con asuntos privados de los miembros de la Familia Real, incluido el Príncipe Heredero».
Seguramente no estén siendo los días más fáciles para los herederos a la corona danesa y no precisamente por la dificultad que siempre entraña montar el árbol de Navidad. Un tierno acto anual, que conlleva no pocos inconvenientes en cualquier familia, incluidas las ‘reales’.
