Justin Bieber: la lía de nuevo saltándose un control en el aeropuerto de Estambul. El cantante pop Justin Bieber ya nos tiene acostumbrados a sus escándalos de todo tipo por allá por donde pase, y es que su gira está dando de sí como para escribir un libro. En esta ocasión el nuevo altercado del artista ha sido en la capital de Turquía, donde ni corto ni perezoso, se saltó los controles para sellar su pasaporte junto a sus 13 acompañantes, para evitar el acoso de las fans, pero cuando fueron tras él, no hubo manera de sacarle del coche, y tuvo que ir la policía hasta allí para poder hacer los trámites necesarios.
Justin Bieber, a sus 19 años, ha conseguido millones de fans por todo el mundo, y desde hace varios meses, está inmerso en una gira internacional, de la que mayoritariamente se ha hablado para comentar la gran cantidad de escándalos que ha protagonizado, y es que parece que al canadiense se le ha subido demasiado a la cabeza eso de la fama.
Ya ha pasado por infinidad de países diferentes, incluido España, y en todos y cada uno de ellos ha dado de qué hablar durante varios días, lo que ha provocado que haya entrado en la lista de los más odiados de Hollywood. En esta ocasión han sido los turcos los que han tenido que soportar sus niñerías, tanto la seguridad del aeropuerto, como los ‘Believers’.
Resulta que Justin Bieber aterrizó hace unos días en el aeropuerto de Sabiha Gökçen en Estambul, donde llegó con su avión privado junto al resto de su equipo, y en lugar de sacar su pasaporte como todo el mundo, salió corriendo hasta el coche que le esperaba a las puertas de la terminal para no ser acosado por las decenas de fans que le esperaban allí.
Acto seguido, los guardias de seguridad del aeropuerto fueron tras él, y tras varios minutos intentando hacer que el canadiense saliera para sellar su pasaporte y poder irse sin éxito, tuvo que ser la propia policía la que tuvo que trasladarse al coche de Bieber para hacer las gestiones necesarias.
Unas horas más tarde, durante el concierto, Justin Bieber pudo ser testigo de cómo el escenario se llenaba de juguetes y regalos varios, provenientes de sus fans estambulíes, ya que era la primera vez que pisaba la capital turca y querían mostrarle su cariño, pero en lugar de agradecerlo, el cantante decidió suspender la actuación, asegurando que si no dejaban de lanzar cosas, no volvería a salir.
Está claro que cada día que pasa Justin Bieber nos sorprende un poco más, y todo ello contando con que acaba de retomar su romance son Selena Gomez, como pudimos ver en la imagen que confirmó su reconciliación hace unos días, y no tiene excusa como hace unos meses.
Esperamos que pronto cambie esa actitud chulesca de estrella del pop, ya que probablemente si sigue así esa fama irá cayendo poco a poco hasta terminar desapareciendo.