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Los conflictos diplomáticos y las desacertadas incoherencias de los Bardem. La familia de actores más famosa de nuestro país demuestra una vez más que ‘quien tiene boca, se equivoca’.
La familia Bardem se caracteriza en nuestro país por ser fieles defensores de los derechos de los trabajadores y el pueblo en general, pero últimamente tanto sus actos como sus palabras están resultando algo desafortunadas, por no decir bastante hipócritas.
La última polémica ha sido protagonizada por Javier Bardem durante la presentación de su documental ‘Hijos de las nubes, la última colonia’, donde expresó una frase que supuestamente le dijo Gerard Arnault, embajador francés de la ONU el pasado 2011: “Marruecos es una amante de la que no se está particularmente enamorado”.
Estas palabras han provocado un verdadero revuelo entre Francia y Marruecos, y han sido calificadas de “escandalosas e inadmisibles” por parte del ministro de Comunicación marroquí.
Pero eso no es todo, el oscarizado actor también ha sido muy criticado tras la última gala de los Premios Goya 2014, donde apoyó a los ciudadanos que luchan por mantener la Sanidad Pública, de la que él ni siquiera parece haber oído hablar, ya que tanto durante el pasado ingreso de su madre por una insuficiencia respiratoria, como para en nacimiento de su segunda hija, a la que finalmente llamaron Luna, acudieron a la prestigiosa Clínica Ruber de Madrid, sin olvidar que para el nacimiento de Leo, la pareja de actores reservó toda una planta del Hospital judío Monte Sinaí por unos 100.000€, después incluso de haberse declarado defensor de los palestinos.
Además Javier Bardem declaró tras las medidas de austeridad de Rajoy en su primer año de mandato, que “este Gobierno quiere aliviar la deuda de este país con los lápices y los cuadernos de los colegios. Y salvar a los bancos en vez de ayudar a los hipotecados, dar una vivienda digna. Quiero incidir en que esto no va de colores de partidos, sino de sensibilidad”, sin embargo acudió a la manifestación en contra de estas medidas, pero ni siquiera se preocupó de las anteriores tomadas por el Gobierno de Zapatero.
Otra de las polémicas más destacadas protagonizadas por la familia de actores fue el ERE que planearon en su restaurante ‘La Bardemcilla’ tras el que dejaron a 11 personas en el paro y sin liquidación, otra decisión que contrasta con el apoyo ofrecido por el actor a los manifestantes de Coca-Cola contra el ERE planeado por la empresa durante la gala de los pasados Goya.
Sin duda tanto Javier Bardem como su familia deberían pensar dos veces sus palabras y actos antes de realizarlos, ya que su credibilidad ha caído en picado.
