[galleria id=»14177″]
Belén de Guindos, hija del ministro de Economía, se ha casado en una romántica ceremonia a la que han acudido, entre otros, Mariano Rajoy o Soraya Sáenz de Santamaría. En un enlace marcado por el buen tiempo y que se celebró en la segoviana Ermita de la Granja de San Ildefonso , muchos rostros de la política y del actual Gobierno fueron los que se dieron cita.
Es verano y es tiempo de bodas. Qué levante la mano el que no esté invitado a una ceremonia durante estos días. Pues bien, como personas que son, los hijos de los Ministros también se casan, y los propios políticos pasan a ser invitados. Este es el caso de la boda entre Belén de Guindos, hija del ministro de Economía, que se ha casado con su pareja, Gonzalo Diniz Méndez.
La pareja se ha dado el «sí, quiero» en la segoviana Ermita de la Granja de San Ildefonso, en una boda que ha contado con la presencia de las más altas esferas políticas del país. Entre los rostros más conocidos se pudo ver a Mariano Rajoy junto a su mujer, Elvira Fernández, la gran desconocida pero que tiene un papel muy importante en el éxito de su marido; Elvira fiel a su estilo fue muy sencilla, además de Soraya Saez de Santamaría, que acompañada por su pareja fue una de las más llamativas en cuanto a su traje. Por allí también estuvo Cristóbal Montoro, ministro de Hacienda o Luis Margallo, ministro de Asuntos Exteriores.
Un traje atrevido
Pero la gran protagonista fue ella, la hija de Guindos. Una bella novia que sorprendió con un estilismo de lo más original. Para su gran día, escogió un vestido con cola y escote en la espalda, jugando con el contraste entre tejidos en los adornos del diseño. Además combinó su vestido con unos altísimos zapatos con plataforma y tacón en forma de reloj de arena, recogiendo su larga melena con una corona de flores que sujetaba también el velo, dividido en dos. Sin duda, muy guapa y de momento una de las bodas más elegantes de este verano.
Como puedes comprobar, una boda muy política que reunió a lo más granado de nuestro Gobierno. Todo ello antes de que Rajoy se enfrente esta semana a sus reuniones con Artur Mas, donde se tratara un tema tan importante como la independencia de Cataluña.