Quince días después del funeral de la Duquesa de Alba, sigue presente la polémica con Carmen Tello. Los fallos de protocolo y los menosprecios durante el acto continúan. Sin embargo, la que fuera gran amiga de Cayetana no quiere polémicas y zanja el tema: “Cayetana era mi amiga, mi hermana mayor, mi familia y, por lo mucho que la he querido y la querré siempre, no voy a entrar en enfrentamientos”.
El funeral de la Duquesa de Alba aún sigue presente. Quince días después, mucha gente se pregunta por qué su gran amiga Cayetana de Alba tuvo tan poco protagonismo y fue dada la espalda por parte de la familia. Ella, sin embargo, no quiere entrar en polémicas. “Los amigos estamos muy tristes y, sobre todo, sus hijos. Lo único que queremos es respetar su memoria. Cayetana era mi amiga, mi hermana mayor, mi familia y, por lo mucho que la he querido y la querré siempre, no voy a entrar en enfrentamientos”.
Parece que no hay enfrentamiento pero si desacuerdos entre Carmen Tello y la familia de la duquesa. Estos desencuentros se han manifestado públicamente a lo largo de las últimas semanas por las destacadas ausencias en los funerales y liturgias religiosas celebradas en Sevilla por el fallecimiento de la duquesa. Y es que a las personasque más cerca han estado de la duquesa en los últimos años les está costado asimilar su pérdida, y sobre todo, que no pudieran estar más cerca de ella en sus últimos momentos.
La propia familia de Cayatena tampoco ha hecho declaraciones, pero según su entorno se comenta que un funeral “no es una boda ni un acontecimiento de carácter social que hay que comunicar a través de un gabinete”, pero en el caso de la Casa de Alba sí hubiera sido necesario cumplir tanto con los compromisos institucionales como con los personales y, sobre todo, con los afectivos de la fallecida.
Mientras seguimos esperando si habrá sorpresas en el testamento, en unas declaraciones a Vanitatis, deja un mensaje: “si los hijos son los primeros en sufrir la pérdida, los amigos íntimos que en ocasiones son más que familia, también llevan su pena”. A buen entendedor…
