Por exigencias del guión, pero los kilos están ahí. Charlize Theron ha tenido que engordar más de 10 kilos (se dice que casi 18) para poder meterse en el papel de Marlo, personaje principal de la película Tully y que llegará a la pantalla grande el próximo año. Ella, como buena actriz, así lo ha hecho aunque su cambio es tremendo. Además la forma de vestir no va para nada con su siempre elegante estilo. Pero esto es lo bueno de las actrices.
El guión lo manda. Charlize Theron ha engordado más de 10 kilos para hacer su próxima película Tully. En las primeras imágenes la vemos luciendo una t-shirt y unos jeans que dejan ver un poco de rollitos en el área de la cintura y un abdomen algo abultado, y es que tendrán que dar vida a una embarazada.
Su descuidado look se completa con tenis deportivos, sin duda un look que nunca hemos visto en la actriz, ni siquiera cuando es fotografiada por paparazzi durante un día normal. Pero para eso estamos hablando de ficción. Da vida a Marlon, madre de tres hijos que se muestra reticente con su nueva niñera en una película que se está rodando en Vancouver, Canadá.
Su papel en Tully no se aleja mucho de la realidad ya que la actriz es madre de dos niños adoptivos, Jackson, de cinco años, y su pequeña bebé August. Ahora con 41 años se centra en su carrera como actriz y deja de lado eso de tener pareja, después de que la saliera mal su relación con Sean Penn.
Atrás queda su figura delgada y glamurosa desfilando por alguna alfombra roja, pero el trabajo es así. Seguro que no tarda mucho en recuperar su cuerpo. Seguro que cuando lo consiga nos dará rabia y pediremos cuál es el truco para lograrlo.