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Carlota Casiraghi ha reaparecido en la escena pública más radiante que nunca. Lo hizo en el Concurso Internacional de saltos de hípica que se ha celebrado este fin de semana en Mónaco. la hija de Carolina de Mónaco no solo participó en una prueba, sino que también asistió a la entrega de trofeos a los campeones, donde compartió protagonismo con su tío, Alberto de Mónaco. Carlota mostró tipazo y además un gran amor por este deporte y los caballos.
El nacimiento de su primer hijo, Raphaël, había provocado que Carlota Casiraghi no se prodigara mucho en actos públicos. Sin embargo, cuando lo hace, lo hace por la puerta grande. Esta semana la hemos visto disfrutar de su deporte favorito, la hípica, participando en el Concurso Internacional de Saltos de Montecarlo que se ha celebrado en Mónaco. Como miembro de la Familia Real, la hija de Carolina de Mónaco no sólo ha participó en el concurso como amazona, sino también asistiendo a la entrega del último trofeo junto a su tío, Alberto de Mónaco, donde destacó por su belleza y su elegancia.
Como es lógico, cuando tuvo que participar llevó la ropa típica para realizarlo. Posteriormente cambió su ropa de montar por un conjunto mucho más elegante para el último día del Concurso Internacional de Saltos. La joven estuvo más radiante que nunca con un vestido azul turquesa hasta la rodilla de la firma Gucci. La hija de Carolina de Mónaco complementó su puesta a punto con unas sandalias de tacón negras con detalle plateado, recogiendo su melena y maquillando sus labios de rojo, a juego con el color de las uñas. Sin duda, la sensación de la noche.
Junto a su tío Alberto de Mónaco, uno de los herederos de las coronas europeas, realizó la entrega de trofeos en el último día del concurso. Lo curioso es que el día anterior fue ella la que ganó un premio, que le entregó su madre. Al día siguiente, tío y sobrina felicitaron al vencedor, el qatarí Bassem Hassan Mohammed, y posaron junto a él en el momento de la entrega. Ahí es cuando se pudo comprobar el amor que tiene la guapa Carlota por los animales, y en especial, por los caballos.
Está claro que la Familia Real de Mónaco atraviesa actualmente uno de sus mejores momentos, y la imagen de Carlota es su fiel reflejo.