Campanario se sienta en el banquillo acusada de fraude

María José Campanario se sienta en el banquillo acusada de un delito de fraude en el juicio de la denominada ‘Operación Karlos’. La mujer del torero Jesulín de Ubrique, recibida con abucheos a su llegada a la Audiencia Provincial de Cádiz, se enfrenta a una pena de más de 4 años de cárcel si se demuestra su implicación en el fraude de la Seguridad Social. La expectación creada ha sido tal que más de 40 medios estaban acreditados para la primera sesión, a la que que sumar los ciudadanos que se agolparon para ver llegar a la Campanario y a Jesulín.
 
Mientras unos están de boda, como en la familia de Chayo Mohedano, otros personajes mediáticos se enfrentan a un difícil momento. La familia Ubrique vuelve a estar en el disparadero, en esta ocasión de la mano de María José Campanario, la mujer del torero Jesús Ubrique, por su presunta implicación en la trama de fraude a la Seguridad Social, la ‘Operación Karlos’. Recordemos que Campanario fue detenida en el año 2006, y posteriormente puesta en libertad tras el pago de 12.000 euros de fianza. Al parecer, según argumenta el fiscal y según consta en el sumario de la causa, la mujer de Jesulín habría pagado unos 18.000 euros para conseguir una pensión por incapacidad laboral para su madre, Remedios Torres, por un lesión de tobillo y trastornos cervicales.
 
Y como todo lo que gira en torno a la familia Ubrique genera expectación, la llegada de María José Campanario a los juzgados no iba a ser menos. Además del despliegue de cámaras y periodistas, a las puertas de la Audiencia la esperaban unos cuantos abucheos. Y eso que hace apenas unos días su ya consabida enemistad con Belén Esteban parecía dar un giro radical cuando la mujer del torero no dudaba en hablar de la generosidad de la ‘Princesa del pueblo’, además de copresentadora del programa ‘Salvame’, en una entrevista concedida a un periódico.
 
El letrado de María José ha solicitado la nulidad del juicio alegando que las escuchas telefónicas no fueron legales. El juicio, el cual durará un mes, se presenta como todo un espectáculo mediático.