Borja Thyssen demanda a la baronesa por dos cuadros valorados en 7 millones

Borja Thyssen demanda a la baronesa por dos cuadros valorados en 7 millones. Lejos de firmar la paz, los desencuentros entre Borja Thyssen y su madre Tita Cervera no dejan de crecer. El joven ha interpuesto una demanda en la que reclama a su madre la propiedad de dos cuadros, uno de ellos un Goya y el otro una obra del italiano Giaquinto. Borja Thyssen asegura que los dos cuadros le fueron donados por el barón, mientras Tita Cervera replica que los tendrá, pero en herencia.
 
La guerra de los Thyssen todavía no ha escrito su último capítulo. De hecho, las desavenencias entre madre e hijo no han hecho sino crecer y, lejos de solventar sus diferencias, el próximo escenario en el que se verán las caras será en los tribunales. En concreto, el día 1 de junio y a raíz de la demanda interpuesta (a finales de 2010 y admitida a trámite por el juez) por Borja Tyssen reclamando la propiedad, y por tanto la entrega, de dos cuadros. Se trata de un Goya, ‘El bautismo de Cristo’, y una obra del pintor italialiano Giaquinto, ‘Una mujer y dos niños junto a una fuente’, valorados en siete millones de euros. De hecho, según han desvelado los medios de comunicación, el propio Borja acudió al Museo Thyssen acompañado de un notario y un abogado para reclamar los dos cuadros, aunque finalmente será un juez el que tenga la última palabra.
 
Y es que parece que últimamente la presencia de rostros famosos en los tribunales es mucho más asidua. Cuando todavía no ha concluido el juicio por el caso que ha sentado en el banquilo a María José Campanario, llegan los Tyssen para animar el panorama mediático.
 
Borja Tyssen, el cual bien podría formar parte de uno del ranking de hijos de famosos más conocidos del papel couché, y la baronesa llevan años de distanciamiento y de demandas cruzadas. De hecho, cabe recordar que en 2009 fue Tita Cervera la que demandó a Borja y a su mujer Blanca Cuesta por sustracción de documentos de la vivienda familiar de La Moraleja. A esto habría que sumar las pruebas de paternidad que la baronesa exigió para saber si el primero de los hijos de la pareja era en realidad de Borja. Ante esta situación, será difícil que la familia llegue a un acuerdo. Ahora, se verán en los juzgados a consecuencia de los valiosos cuadros.