Beyoncé: arma la polémica al cantarle a la infidelidad [VÍDEO]

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«Puedes sentir la deshonestidad, está en tu aliento mientras finges ser tan caballero». «Mirando mi reloj, él debería estar en casa. Hoy me arrepiento de haberme casado, él siempre tiene excusas”. Estas frases son traducciones de las canciones que Beyonce ha introducido en su último trabajo llamado Lemonade, y donde hace una oda a la infidelidad. Algo que a los sectores más puristas no ha sentado nada bien. La polémica ya está en marcha en Estados Unidos.

Beyonce ya ha conseguido el primer requisito para que su nuevo disco sea un éxito: que hable todo el mundo de él. Y es que la cantante lo ha logrado con su «Lemonade». Ahora bien, como dice el dicho, «que hablen de mí, aunque sea mal».

El pasado fin de semana Beyoncé, una de las estrellas mundiales de la canción, lanzó su nuevo trabajo a través de un documental artístico que se estrenó en la HBO. Sesenta minutos y doce canciones que han desatado mucho revuelo. A menos de una semana de comenzar su nueva gira mundial, The Formation World Tour, nos quedamos con unas letras que hacen apología a la infidelidad y a que las mujeres no se sientan posesión de sus maridos.

Así por ejemplo, en el tema Pray you catch me, se pueden escuchar frases del tipo «Puedes sentir la deshonestidad, está en tu aliento mientras finges ser tan caballero». Mientras que en Hold up (Espera) dice «¿Qué es peor, parecer celosa o loca? Más bien pisoteada últimamente, preferiría estar loca». Por último, en Sorry asegura “Mirando mi reloj, él debería estar en casa. Hoy me arrepiento de haberme casado, él siempre tiene excusas”.

Letras muy radicales con las que ha conseguido encender a medio Estados Unidos. Lo que no sabemos si serán basadas en hechos reales, o simplemente lo hace para llamar la atención. Muchos han visto en esta obra la confirmación de la supuesta infidelidad que ya planeó sobre Jay Z en mayo de 2014. Los más fans ya hacen conjeturas y buscan una explicación a cada letra de cada canción.

Así pues la polémica está sobre la mesa. ¿Qué te parece? ¿Crees que somos demasiados radicales con estas frases y no es para tanto?