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Bárbara Rey: alcohol y desmadre en Acorralados. Ha dejado el puesto de capataz (capataza, como diría Jorge Javier Vázquez), pero no por eso renuncia a su parcela de protagonismo. La culpa esta vez la tuvo una botella de licor, a la que Bárbara Rey se agarró con excesiva pasión. Y tanto darle al licor, al final se le acabó subiendo a la cabeza. No fue la única concursante del reality de Telecinco que tuvo una mala noche. El Dioni, por si no había tenido bastante con su detención, se llevó la gran bronca de sus compañeros por intentar apoderarse de una botella.
Después de la detención en directo del Dioni por un delito contra la seguridad vial (conducción en estado ebrio), la siguiente en liarla parda en Acorralados ha sido Bárbara Rey. La ex vedette decidió liberar tensiones y olvidarse de que está ‘acorralada’ tomándose unos chupitos durante la cena que los concursantes se dieron a base de los productos de la tierra que, por gentileza del programa, les dejaron en un arcón. Pero la ex vedette no calculó y el licor se le subió a la cabeza. Como ella misma reconoció, se agarró una buena “castaña”. Y luego llegó la resaca y el arrepentimiento en el confesionario y la promesa de no volver a probar una gota de alcohol.
Una resaca que, a buen seguro, le habrá hecho olvidarse por unos momentos de los frentes que tiene abiertos en la casa con algunas de sus compañeras. Como aquí todo cambia según sopla el viento, Bárbara y la madre de Aída Nizar, Ángeles Delgado, parecen haberse dado una tregua. Mientras, la ex vedette sigue sumando enemigas dentro de la granja, como la ex tronista Brenda, con la que ha tenido más de una acalorada discusión en la que solo les ha faltado darse un bofetón. Y entre tanta disputa, la bronca también le ha salpicado a Nagore, pareja de su hija Sofía Cristo, tras montarse su propia fiesta con Blanca y Brenda con cuatro botellas de sidra y unos buenos tacos de pan y queso.
Mientras, otra botella protagonizaba la refriega entre el resto de concursantes y El Dioni, el cual trató de apoderarse de ella en un despiste de sus compañeros.