La polémica en ‘Supervivientes 2024’ está servida con los continuos enfrentamientos entre Ángel Cristo Jr y Carmen Borrego
Es cierto que ‘Supervivientes’ lleva al límite a todos sus concursantes, pero llama poderosamente la atención que en la primera semana de reality ya exista una enemistad tan marcada como la de Carmen Borrego y Ángel Cristo Jr.
Desde la pre-convivencia su mal rollo era palpable. Un comentario muy desafortunado del hijo de Bárbara Rey sobre la edad de Carmen y sus capacidades en el concurso, desató un enfrentamiento entre ellos que cada vez comienza a ser más tenso.
La actitud de Ángel con Carmen no es ni mucho menos fruto de ‘Supervivientes’
La amistad entre las Campos y Bárbara Rey parece el principal detonante de esta fijación de Ángel por Carmen. Tan solo hay que echar mano de las declaraciones tanto de Bárbara como de su hija Sofía, con las que Ángel no mantiene ningún tipo de relación desde su polémica aparición en ‘¡De Viernes!’, en las que madre e hija se deshacían en elogios hacia la hija de María Teresa Campos y le mostraban su apoyo incondicional, mientras que hacían oídos sordos al escuchar hablar de Ángel.
Quizá por ello, consciente de que tanto Carmen desde dentro como su madre y su hermana desde fuera se apoyarían mutuamente, Ángel ha decidido iniciar una guerra sin mucho sentido contra Carmen Borrego. Lo único que parece evidente, más si cabe después de lo ocurrido en el puente de ‘Supervivientes’ en la última emisión del programa, es que una reconciliación entre la mayor de las Campos y el hijo de Ángel Cristo resulta absolutamente imposible.
La edad, el menor de los problemas en ‘Supervivientes’
Habiendo expuesto la mala relación que existe entre ambos cabe incidir la discusión inicial que se produjo en la pre-convivencia. Ángel aseguró que Carmen concursaba con su cuidador del geriátrico, refiriéndose a Kike Calleja, y, como es obvio, burlándose de la edad de la malagueña.
Más allá de la broma de mal gusto, el hijo de Bárbara Rey quedó retratado al negarse a participar en una de las primeras pruebas de la edición. Tanto es así que Carlos Sobera tuvo que recordarle el programa al que acababa de entrar y la exigencia física que conlleva. La gran diferencia entre sendos concursantes es que mientras Carmen se esfuerza y participa en las pruebas a pesar de sus limitaciones físicas; Ángel decide darse por vencido y excusarse con ciertos problemas en sus meniscos para ni siquiera intentarlo.
