Anita Pallenberg: Secretos de vida de la Rolling Stone femenina

Anita Pallenberg fue famosa por haber sido la novia de dos guitarristas de los Rolling Stones: primero Brian Jones de 1965 a 1967, y después fue pareja de Keith Richards de 1967 hasta 1980, con quien tuvo tres hijos. Ha muerto cuando tenía 73 años y una salud frágil, con secuelas de la hepatitis C y serios problemas de cadera. Una vida llena de secretos para la denominada Rolling Stone femenina.

Anita Pallenberg fue una mujer muy especial. En todos los sentidos. Una modelo, una actriz, una verdadera enamorada de la música, una mujer revolucionaria, y sobre todo, la Rolling Stone femenina. Fue la novia de dos guitarristas de los Rolling Stones: primero Brian Jones de 1965 a 1967, y después fue pareja de Keith Richards de 1967 hasta 1980, con quien tuvo tres hijos: Marlon (1969, cuyo nombre fue en honor a Marlon Brando, amigo de la pareja), Dandelion Angela (1972) y Tara (1976), cuyo fallecimiento por muerte súbita con apenas diez semanas de nacido dio inicio a la crisis entre sus padres.

Su amor por la mítica banda que ha logrado hacer un legado imborrable en la historia mundial era mutuo: los integrantes del grupo musical la consideraban realmente una musa inspiradora. envidiaba por muchas, sus atuendos y su impronta generaban una fuerte influencia en el resto de las mujeres del momento. Fue sin duda, una mujer del siglo XXI.

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También disfrutó de cierta fama como actriz, aunque sus películas no fueran demasiado conocidas. Entre ellas destacan Barbarella y Performance, donde comparte escenas junto a Mick Jagger, cuya hija ahora es modelo. Hija de un artista italiano y de una secretaria alemana, manejó estos idiomas con fluidez desde pequeña. Después de Londres, vivió en Alemania y en Nueva York, donde se enroló en el Living Theater y en la Factoría de Andy Warhol. Tenía la nacionalidad estadounidense.
Anita Pallenberg: Sus excesos
Sus excesos provocaron que fuera detenida. Se sometió a rehabilitación y dejó las drogas, aunque sufrió alguna recaída. Evitó la tentación de escribir sus memorias y se convirtió en símbolo de las mujeres rockeras, pero sobre todo de los Rolling que aún siguen en activo.

En sus últimos años, convertida al vegetarianismo, se dedicó a cultivar su huerto en el barrio londinense de Chiswick. Intervino en películas de directores de culto como Abel Ferrara o Harmony Korine. También disfrutaba pinchando música en fiestas privadas. Anita Pallenberg es todo un referente para las mujeres de hoy en día.

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