¿Por qué no consigo perder peso en verano? Este decálogo de errores tiene las respuestas. ¿Quieres ponerte en forma, recuperar tu figura, pero no consigues perder esos kilitos de más ganados sin apenas darte cuenta? La decisión de perder peso no siempre viene acompañada de resultados inmediatos. Pero antes de dar al traste con la dieta, conviene revisar nuestros hábitos, porque muchas veces son nuestros propios errores nutricionales los que impiden que perdamos peso.
Con la llegada del verano, época de descanso, también nos preocupamos más por nuestra figura. Estamos en los meses del año en el que perder peso nos ocupa de manera especial, sobre todo para lucir un bonito cuerpo, tanto por dentro como por fuera. Pero la decisión de perder los kilos de más implica algo más que seguir una dieta baja en calorías. El primer consejo para evitar dar al traste con la dieta es recordar que la pérdida de peso, para que sea efectiva –evitar el efecto reboto- debe ser progresiva, nunca demasiado rápida porque podríamos conseguir el efecto contrario al dejar la dieta. Es uno de los errores más comunes a la hora de perder peso, buscar una dieta lo más rápida posible. Pero no es el único error que podemos cometer. A continuación, vamos a ver los errores más comunes a la hora de perder peso.
Adelgazar demasiado rápido
Lo más aconsejable es comenzar la operación bikini varios meses antes del verano, pero si nos hemos demorado lo más aconsejable es empezar la dieta pero sin buscar resultados inmediatos, aprovechar el verano para revisar nuestros hábitos y poner en práctica otros más saludables, entre ellos, aprender a comer para mantener nuestro peso ideal. Las dietas o regímenes demasiado rápidos, además de hacernos pasar hambre por la restricción excesiva de calorías, también pueden hacer que al dejarla ganemos el peso o incluso lo aumentemos. Las dietas milagro no suelen ser la mejor opción para recuperar la figura, sino que lo más aconsejable es seguir una dieta en la que podamos comer de todo, reduciendo las calorías y las raciones, pero sin dejar fuera ningún nutriente esencial.
Dietas de un alimento
Las dietas basadas en un alimento –dieta de la sandía, dieta del kiwi, dieta la piña, entre otras- no solo pueden hacer que nos aburramos, sino que la pérdida más importante será la de líquido. Hay otros motivos para no decantarse por estas dietas cuando lo que buscamos es un resultado demasiado inmediato, ya que puede hacer que la ingesta de calorías sea insuficiente para mantener nuestro ritmo. Generalmente, las dietas basadas en un único nutriente (proteínas, por ejemplo) dejan a otros fuera, aún siendo esenciales, lo que puede provocar una carencia nutricional o problemas de estreñimiento. Las dietas basadas solo en proteínas puede provocar un problema de halitosis.
Perder más de cinco kilos
No todos los incrementos de peso responden a una misma causa. Aunque es cierto que la alimentación desequilibrada es uno de los motivos que suelen estar detrás de los problemas de sobrepeso, hay que confirmarlo. Por este motivo, si nos vamos a poner a dieta hay que conocer la causa del aumento de peso –consultar al médico o especialista en nutrición- y, si queremos perder más de cinco kilos, lo más aconsejable es seguir el plan dietético médico, no tratar de perderlos por nuestra cuenta con dietas rápidas. El sobrepeso es la antesala de la obesidad, por lo que conviene tratarlo a tiempo.
Laxantes
¿Los laxantes son eficaces? No deben ser utilizados nunca como sustitutos de la dieta, solo como complemento, y mejor optando por los naturales y bajo consejo médico. Recurrir a los laxantes para perder peso puede poner en riesgo nuestra salud. De entrada, los laxantes nos hacen perder más agua –y con ello, sales minerales-, no grasa, por lo que podemos perder contenido hídrico, fundamental en verano para combatir las altas temperaturas corporales. De igual manera, abusar de los laxantes para adelgazar puede conducir a un estreñimiento crónico.
Horario de comidas
Ni saltarse las comidas –cinco al día- ni hacer ayuno es la mejor opción para adelgazar. El saltarnos, por ejemplo, el desayuno, una de las cinco comidas esenciales y que más energía nos aporta, solo hará que lleguemos a la siguiente comida con más hambre. Comer sin horarios desestabiliza nuestro metabolismo y los niveles de glucosa en sangre, entre otros.
Ejercicio físico
El ejercicio físico, como acompañante de una dieta equilibrada, es la mejor manera de mantener nuestro peso. Pero no se trata de abusar de la práctica deportiva para perderlo, ya que corremos más riesgos de lesiones y de gastar masa muscular cuando la grasa haya desaparecido. Los beneficios del ejercicio físico responden a la moderación a la hora de practicarlo.
Productos dietéticos
Los productos dietéticos para adelgazar (barritas, galletas integrales, batidos…) son un complemento, no un sustituto. Es decir, no podemos estar todo el día comiendo galletas integrales, porque eso no va a redundar en pérdida de peso. Son una buena opción para el picoteo entre horas o como complemento de alguna comida (desayuno, aperitivo, merienda), pero no tienen que ser el menú diario.