Tomar una copa de vino al día, junto con las comidas, reporta múltiples beneficios para la salud, a los que además podemos añadir uno que, a buen seguro, ni te habías imaginado. Y es que el vino, tomado con moderación cuando se trata de alcohol, ayuda a adelgazar. Y lo avalan los científicos. Diversos estudios han indagado precisamente en los beneficios que reporta, a la hora de adelgazar, incluir una copita de vino en la dieta (unas 130 kcal si es vino tinto, 120 si es vino blanco). Así, por ejemplo, un estudio realizado por investigadores de la Universidad Puerdue (Estados Unidos) apuntó a uno de los componentes del vino como aliado para perder peso, el piceatannol, un antioxidante que además de combatir los efectos de los radicales libres retardaría la producción de células adiposas.
Vino para quemar grasa
Por su parte, otra investigación realizada por la Universidad Estatal de Oregón apuntó que el vino puede tener un efecto quemagrasa en el organismo, en concreto, cuando el vino procede de uvas muscadinas (ricas en ácido elágico, polifenol también presente en los frutos rojos). Eso sí, es importante que vaya acompañado de una dieta adecuada.
Entre los estudios más interesantes realizados hasta ahora, y que también inciden en los beneficios del vino para adelgazar, se incluye el del Harvard Medical School. Durante casi 13 años analizaron los hábitos de vida y alimentación de más de 19.000 mujeres de distintas edades. La conclusión que arroja el estudio es que consumir 30 gramos de alcohol al día (el equivalente a dos copas de vino) ayuda a reducir los riesgos de padecer problemas de sobrepeso u obesidad. La explicación estaría en el resveratrol, un potente antioxidante con la capacidad de transformar la grasa blanca en beige, lo que favorece la quema de calorías.
Argumentos científicos que nos brindan la oportunidad de disfrutar de todo el sabor de la uva en una copa de vino.
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