El esquí de montaña es una especie de trail running en la nieve, combinado con el esquí. Se trata de una actividad donde se realizan ascensos en montaña nevada a pie combinados con técnicas de esquí de ascenso y descenso, por lo que se necesita una preparación física específica enfocada en la resistencia corporal.
Este fantástico deporte está indicado para personas aventureras y físicamente preparadas, que les guste la naturaleza, la nieve, el esquí y exigir su cuerpo al límite. El material que se necesita se define entre material de alpinismo, como crampones, piolet, cuerdas, arnés, mosquetones… y material de esquí y bastones.
No siempre todas las personas que practican esquí de montaña viven en un paraje nevado, pero eso no impide su preparación, que debe ser durante todo el año, enfocándose en ejercicios que aumenten su resistencia aeróbica y anaeróbica en altitudes elevadas para mejorar el rendimiento de oxígeno en los pulmones.
El trail running, el mejor aliado del esquí de montaña
Generalmente los deportistas profesionales y los amateur que deseen introducirse en el mundo del esquí de montaña, entrenan durante la temporada sin nieve trail running o carrera de montaña. Es la mejor opción para prepararse para los meses de invierno y nieve, porque permite conservar la resistencia en desnivel positivo, aumentar el umbral aeróbico y entrenar la fuerza explosiva o resistencia anaeróbica y, una de las cosas más importantes, mantener la gestualidad de los esquís con brazos y piernas.
Los entrenamientos trail running enfocados al esquí de montaña se hacen generalmente con los bastones de esquí, precisamente para no perder la gestualidad de los brazos y piernas en los ascensos y ejercitar el tren superior de los brazos (deltoides, trapecio, pectorales, tríceps, etc.), indispensable en el esquí de montaña. Lo ideal es hacer entrenamientos continuos CACO (Caminar-Correr) con bastones en montaña, para mejorar la capacidad aeróbica.
En los entrenamientos de trail running en montaña se debe dar prioridad a las subidas y terrenos escarpados, tratando de aumentar el ritmo en estos terrenos para mejorar la resistencia anaeróbica y la capacidad de oxigenación del cuerpo. Durantes las bajadas se combinan descensos tranquilos con bajadas rápidas en terrenos irregulares con el uso de bastones, para fomentar la coordinación y el equilibrio.
Si eres de las que te gusta arriesgarte en los deportes, es importante que te ejercites adecuadamente y te acostumbres a trotar y bastonear en la montaña con tiempo suficiente antes de comenzar a practicar esquí de montaña. Tu condición física es esencial porque es un deporte extremo, que requiere mucha exigencia y resistencia para que el cuerpo no llegue a fatigarse en zonas altas con falta de oxígeno. Incluso aunque no te plantees la competencia y sólo decidas hacer esquí de montaña como hobbie, es importante que siempre mantengas tu forma física al 100%.
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