Marcapasos gástrico: 45% menos de exceso de peso en un año. Es el resultado que avala a este novedoso sistema –en nuestro país los primeros se comenzaron a colocar hace poco más de un año- especialmente diseñado para el abordaje de los problemas de sobrepeso y obesidad. Un sistema que, tras un año de tratamiento, permite reducir de manera notable el exceso de peso. Hasta ahora se han implantado 22, con resultados que le avalan como un sistema eficaz con ventajas que no se limitan solo a la pérdida de peso, sino que también puede ayudar a controlar las patologías asociadas de tipo metabólico.
El marcapasos gástrico es un novedoso sistema para tratar los problemas de peso y obesidad que, tras doce meses de tratamiento, ha logrado que los pacientes reduzcan el exceso de peso en una media del 45%, porcentaje que ha sido incluso superior entre los pacientes con un índice de masa corporal (IMC) entre 30 y 40 (el exceso de peso se redujo casi un 54%). Son los resultados del seguimiento realizado a los pacientes a los que, hasta ahora, se les ha implantado este sistema (Abiliti) en la clínica La Luz, y que han sido presentados en la primera edición del Congreso Médico Quirúrgico de la Obesidad celebrado en Madrid. Resultados que constatan que este sistema es una opción a tener en cuenta a la hora de abordar los problemas de obesidad.
Tal y como hemos señalado, los resultados más sobresalientes se obtuvieron en un tramo concreto del IMC, si bien entre los que presentaban las tasas más elevadas –un IMC superior a 44-, la pérdida media de peso se situó en el 36%.
Resultados de la aplicación de un sistema que los especialistas subrayan que es mínimamente invasivo –la duración media de la intervención ronda los 50 minutos y tan solo requiere un día de ingreso hospitalario-, lo que le convierte en una opción a otras soluciones quirúrgicas, como el bypass o la denominada gastrectomía tubular. El implante no altera la anatomía y fisiología de nuestro estómago. El marcapasos gástrico está además especialmente pensado para aquellos pacientes que saben que, además del tratamiento, hay que revisar y modificar aquellos hábitos alimentarios menos saludables. En otras palabras, el tratamiento implica un objetivo añadido, el de mejorar la relación con la comida (conocer qué alimentos nos hacen engordar y por qué, cuáles nos aportan calorías vacías y los consumimos solo para calmar la ansiedad).
Otra de las ventajas que destacan los especialistas es que el implante del dispositivo se puede prolongar el tiempo que sea necesario, ya que se puede activar en función de las necesidades de cada paciente y, en caso de que fuera necesaria su retirada, se puede hacer con una sencilla intervención. Por último, aunque no por ello menos importante, este novedoso sistema está preparado para el control de otras patologías de tipo metabólico asociadas al sobrepeso y la obesidad, como la diabetes. Este sistema, en concreto, permite controlar los niveles de glucemia.
¿Cómo funciona el marcapasos gástrico? El dispositivo produce estímulos eléctricos directamente en el estómago para provocar sensación de saciedad cuando el paciente ingiere algún tipo de alimento fuera de las horas establecidas. El sistema incluye el seguimiento del paciente a distancia y, al tiempo, establece las pautas para adquirir hábitos más saludables y comer de manera moderada.
Una vez instalado el dispositivo, a las seis horas se pueden tomar líquidos y en un plazo de 24 horas se pueden tomar alimentos sólidos.
