Las 15 reglas de oro para estar perfecta en bikini

Comer sano es la mejor manera de adelgazar y de cuidar nuestra salud y nuestra figura. El verano, y el primer chapuzón en bañador, nos hace prestar más atención a nuestro peso, algo que quizá habíamos descuido en los meses de frío. Si estás decidida a plantar cara a los kilos de más, no olvides que el estrés y las prisas no son los mejores aliados para conseguirlo. Perder peso demasiado rápido nos expone mucho más al efecto yo-yo (recuperar el peso perdido nada más dejar la dieta). Además, de nada servirán nuestros sacrificios si enseguida recuperamos los kilos perdidos. Las dietas demasiado rápidas suelen ser mucho más estrictas, al tiempo que podemos poner en riesgo el metabolismo. Lo mejor es adoptar una dieta sana, variada y equilibrada, combinada con la práctica regular de ejercicio físico. Y, muy importante, revisar y corregir aquellos hábitos menos saludables y que nos hacen engordar.

Por lo tanto, es mejor optar por adoptar una dieta más baja en calorías, pero sin que eso nos prive de todos los nutrientes necesarios para nuestro bienestar. No se trata de dejar de comer (eliminar alimentos básicos de la dieta no es la solución, como el pan), sino de comer menos y bien, eliminando todas las calorías vacías que simplemente nos hacen engordar, como los clásicos aperitivos, bollería, bebidas carbonatadas y azucaradas. Para ponerse en forma, y recuperar el peso ideal, vamos a ver las 15 reglas de oro para adelgazar sin riesgos para la salud.

Las 15 reglas de oro Consejos prácticos para que salud y dieta vayan de la mano. Es importante mantener los hábitos saludables y no relajarse. Eso no significa que no se pueda caer en la tentación de vez en cuando y darse algún capricho culinario. En ese caso, recuerda que debes compensar (si hemos comida más de lo debido en la comida, haz una cena ligera a base de ensalada de verduras).

1. Nunca te saltes las comidas, desayuno incluido.
2. Incluir en cada comida una porción de carbohidratos.
3. Incluir en cada comida principal una buena guarnición o ración de verduras.
4. Tomar dos tentempiés al día (a media mañana y a media tarde) optar por la fruta de temporada.
5. Limitar el consumo de queso de 2-3 veces a la semana.
6. Comer pescado al menos 2 veces a la semana.
7. Incluye en una de las comidas principales, por lo menos 2-3 veces a la semana, platos únicos, como sopas (legumbres, cereales, etc.).
8. Optar por los condimentos vegetales para platos de pasta y limitar las salsas más elaborados a 1-2 veces a la semana, y siempre que vayan acompañadas en la misma comida por una buena guarnición o ensalada de verduras.
9. Evita los alimentos con la misma función nutricional en la misma comida (como la pasta y patatas).
10. Optar por métodos de cocción más saludables como al vapor, al horno o a la plancha.
11. Además de caldos de verduras, apuesta por los zumos verdes y por las infusiones de hierbas.
12. Minimizar el consumo de grasa y sal.
13. Dar prioridad al aceite de oliva virgen extra y, sobre todo, para aliñar en crudo.
14. Limitar el consumo de dulces, y reducirlo al desayuno.
15. Beber al menos un litro y medio o dos de agua u otras bebidas drenantes (infusiones).

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