Su pequeño tamaño, apenas 12 gramos, no delata su contenido nutricional. Y es que detrás del particular color de su fina cáscara, entre beige y marrón, nadie diría que se esconde un huevo más nutritivo que el de gallina. Son los huevos de codorniz, de sabor más ligero y más fáciles de digerir. Así, por ejemplo, contienen un 13% más de proteínas, lo que explica que su valor nutricional pueda ser hasta tres veces mayor al de los huevos de gallina. Pero no es el único argumento para hacerle un hueco en la dieta a este saludable alimento, y que es además es bajo en calorías.
Huevos de cordorniz beneficios
Estar a dieta, o mantener el peso ideal, no se debe traducir en dejar de comer o en eliminar nutrientes esenciales. Con los huevos de codorniz, que puedes incluir en el desayuno por ejemplo, tu dieta no se resentirá. Además de ser una fuente excepcional de proteínas, son ricos en vitaminas A, C, D, E, K y en especial del complejo B, buenas para la salud del corazón y de cerebro. También son ricos en ácidos grasos Omega 3 y en minerales (calcio, hierro, fósforo, zinc, potasio, zinc, selenio o magnesio). Precisamente, gracias a su contenido nutricional los huevos de codorniz son buenos para regular los niveles de triglicéridos.
Huevos de codorniz calorías
¿Y cuántas calorías aportan? Pocas, 158 calorías (kcal) por cada cien gramos de huevos de codorniz (menos que las 183 que nos repartan 100 gramos de huevos de gallina). Lo recomendable, por su tamaño, es tomar entre 3 y 4 huevos por ración, que te aportarán no más de 70 calorías, además de mejorar el metabolismo.
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