Helados que adelgazan: recetas e ideas para el verano

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Refrescantes, hidratantes y además adelgazan. Sí, has leído bien, los helados, esos incondicionales del verano, también podemos prepararlos en casa eligiendo los ingredientes más adecuados para favorecer su efecto depurativo. Un helado, con estas sencillas recetas que te presentamos, puede ser mucho más que un alimento para aplacar el calor, ya que no hay que renunciar a ellos si nos preocupa cuidar la línea. Aquí tienes 10 recetas que convertirán a tus helados caseros en la mejor propuesta depurativa. [/multipage]

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1 Helado de limón y jengibre

El agua, combinada con limón y jengibre, es una fórmula excelente para depurar y eliminar toxinas del organismo. Ingredientes que nos sirven para preparar un helado casero, con una infusión de agua, jengibre y limón que, a continuación, vertimos en las cubiteras y colocamos en el congelador hasta que solidifiquen. Podemos añadir unas hojas de menta para realzar el sabor de los helados. [/multipage]

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2 Helado de fresa y menta

En verano, entre las frutas más depurativas y sabrosas, están las fresas, bajas en calorías y ricas en agua y vitaminas. Un helado de fresa es una manera de saborear las meriendas y, al mismo tiempo, favorecer el efecto depurativo de la dieta. Limpiamos las fresas y las cortamos en trozos. Exprimir un limón y añadir el zumo al agua. Llenar los moldes para polos o helados y añadir las fresas cortadas y unas hojas de menta. Introducir en el congelador. [/multipage]

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3 Helado de kiwi

Pelamos 4 kiwis y reservamos uno para decorar. Los otros 3 los cortamos en rodajas. Batir los kiwis y mezclar con agua, añadiendo dos gotas de edulcorante. Colocar las rodajas del kiwi que habíamos reservado en el fondo de los moldes para helados, y a continuación añadir la mezcla anterior. Dejar una noche en el congelador. [/multipage]

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4 Helado de pepino y menta

Si hay una hortaliza depurativa es, sin duda, el pepino, uno de los ingredientes de estos refrescantes helados. En este caso, preparamos agua de pepino y añadimos unas hojas de menta. Llenar los moldes de helado con la mezcla. Si te gusta, añadir una pizca de jengibre. [/multipage]

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5 Helado de yogur sin azúcar

Para preparar este delicioso helado de yogur sin azúcar, mezclaremos bien en un recipiente los siguientes ingredientes: un yogur natural sin azúcar o griego sin azúcar, una yema de huevo, una cucharada de stevia, un poco de leche, nata y miel (opcional). A continuación, lo metemos en un recipiente y lo dejamos en el congelador durante unas horas.

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6 Helado de melón

Melón, nata y stevia, no necesitas nada más para preparar este helado refrescante y bajo en calorías. Trituramos el melón con la stevia, montamos por otro lado la nata e incorporamos a la primera mezcla. Lo congelamos durante 45 minutos, pasado este tiempo, lo sacamos y le damos una vuelta con ayuda del tenedor para después volver a congelar durante otros 30 minutos. ¡Te va a encantar!

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7 Helado de sandía

¿Conoces alguna fruta que tenga más agua que la sandía? Para preparar este helado bajo en calorías tienes que triturar la sandía, mezclar con el jugo de medio limón y un poco de nata montada. Para endulzar y no aportar apenas calorías, antes de meter al congelador, añade stevia o una cucharadita de miel.

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8 Helado de vainilla sin azúcar

Calentamos en un cazo la leche junto con una cucharada de stevia, lo sacamos del fuego y dejamos que se enfríe. Después lo mezclamos con las yemas de huevo y la vainilla, removemos hasta que quede una base parecida a la de las natillas. Agregamos poco a poco la nata montada y, una vez que esté todo incorporado, lo congelemos durante toda la noche.
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9 Helado de sorbete de pera

Necesitaremos: 3 peras, zumo de 2 naranjas, 4 cucharadas de azúcar moreno y la ralladura de 1 limón. Trituramos las peras y añadimos el resto de los ingredientes. Dejamos en el colgador durante unas horas y, antes de servir, volvemos a batir para asegurarnos de que no hayan quedado grumos.
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10 Helado de piña y coco

Los ingredientes son: una piña madura y una lata de leche de coco. Pelamos y cortamos la piña, la batimos junto a la leche de coco, la metemos en el congelador y la sacamos cada 10 o 15 minutos par removerla con ayuda de una cuchara. Cuando veamos que tiene una textura cremosa es que está listo para servir.

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