El silencio, un aliado inesperado, que nos ayuda a adelgazar. Puede parecer extraño, pero te desvelamos los detalles y razones que explican que el silencio, es decir, no hablar con nadie de la dieta, nos tienda una mano para ganar la batalla a la báscula y perder los kilos de más.
¿Ayuda el silencio a bajar de peso? La pregunta puede resultar extraña, pero la respuesta es que sí. Al igual que es posible bajar de talla durmiendo, el silencio es un aliado con el que seguro que no habías contado. No hablar con nadie de la dieta es una forma segura de perder peso más rápido. De hecho, la respuesta está avalada por un estudio llevado a cabo en la Universidad de Nueva York y que revelaba que aquellas mujeres que aptaban por silenciar que estaban a dieta, curiosamente, conseguían resultados más rápidos y efectivos. Hay poderosas razones, como veremos a continuación, para optar por no hablar de la dieta cuando nos hemos propuesto adelgazar. Además, probar es sencillo.
Silencio: una ayuda para perder peso
Muchas mujeres confiesan no ser capaces de perder peso debido a la presión del entorno. Los consejos y preguntas insistentes sobre la dieta, y sobre los resultados, de amigos y familiares, aunque se hagan con la mejor intención, pueden suponer un extra de presión, conseguir aumentar nuestra ansiedad si vemos que nuestro entorno no nota los efectos tan rápido como deseamos. La ansiedad, la tensión nerviosa, son uno de los principales saboteadores de las dietas. En estos casos, aunque es normal querer compartir la pérdida de peso con los amigos y la familia, puede resultar contraproducente. También puede suceder que nuestros más allegados no compartan nuestra decisión de ponernos a dieta, lo que puede mermar nuestros objetivos y hacer que renunciemos a seguir intentándolo. Si estás decidida a perder los kilos de más, y a recuperar tu figura, olvídate de las opiniones ajenas y fija tu meta. El silencio, en estos casos, es la decisión más acertada.
Tal y como señalan los autores de la investigación llevada a cabo por la Universidad de Nueva York, existe también el riesgo de que el entorno nos haga sentir que ya hemos llegado a la meta, lo que nos hará tener menos determinación y, con ello, mayor riesgo de cometer algún exceso con la dieta.
Perder peso: consejos silenciosos
La única manera de asegurarnos de que las personas que nos rodean no nos presionarán con la dieta o nos harán sentir más o menos culpables, es no mencionarlo en absoluto. Además de saber elegir qué comer y qué no comer para que nuestra dieta sea efectiva, un buen aliado será guardar silencio y dejar que nuestro entorno vaya apreciando, por sí mismo, los resultados. De esta manera, constatarán que, pese a sus opiniones contrarias, la dieta sí funciona, lo que nos hará sentir incluso mejor.
Si estamos a dieta, no hay que darle mayor importancia a los comentarios de los demás a la hora de elegir los alimentos menos calóricos. Además, para que la dieta sea efectiva, no olvides acompañarla de la práctica de ejercicio físico. Por ejemplo, andar, un ejercicio sencillo que además nos ayudará a liberar ansiedad y a sentirnos mejor.
Aunque estemos a dieta y hayamos optado por guardar silencio, esto no quiere decir que tengamos que comer solos o aprovechar los momentos de soledad para comer (viendo la televisión, por ejemplo), ya que esto, tarde o temprano, nos llevará a cometer excesos. Se trata de disfrutar de nuestro tiempo, de hacerlo en silencio, pero sin aislarnos. Consejos para que la dieta sea un éxito.