La mejor receta posible para lograr cautivar a invitados. Cómo hacer los mejores buñuelos de viento para sorprender estas Navidades.
Se acerca la Navidad y esto implica un momento de felicidad para muchas personas porque es una época muy bonita y familiar. Se trata de la mayor forma y también el momento idóneo para estar con la familia y con los amigos. Es un momento de disfrute absoluto donde todo lo que se realiza se hace con amor y comprensión.
Y en una Navidad no puede faltar ni la comida ni la cena de las fechas más especiales como son Nochevieja o Nochebuena, Año Nuevo y la propia natividad del señor. Con todo ello, los invitados no pueden faltar y las reuniones familiares tampoco por lo que es imprescindible unos platos que estén a la altura. Precisamente sobre esto va a ir este post, de hacer los mejores buñuelos de viento para estas navidades.
Receta de los buñuelos de viento
Hay que tener en cuenta que se trata de una comida originaria de España, aunque hay que decir que en México es donde la perfeccionaron y dividieron en dos tipos: los de viento y los de rodilla. En este caso vamos a intentar sacar el mayor partido a los de la primera forma.
Lo primero que hay que tener en cuenta es el tipo de ingredientes que vamos a tener que necesitar para realizar nuestros buñuelos de viento. Vamos a apostar por 12 porciones ya que se trata de un postre perfecto para las navidades. Necesitaremos dos tazas de harina de trigo, una de leche, una cucharada de vainilla y otra de mantequilla. También es imprescindible un cuarto de cucharada de sal, azúcar y canela para que quede más dulce y cuatro huevos.
Con todo ello, ya podemos empezar a hacer nuestros buñuelos de viento. Para ello, lo primero que hay que hacer es licuar la leche, los huevos y tanto la mantequilla como la vainilla. Acto seguido habría que agregar a esa harina la sal y licuarla para lograr crear la masa. Después se vacía sobre un tazón y se empieza a calentar aceite en el que se sumerge este molde creado previamente.
Hay que estar atento porque con 10 segundos es suficiente para que esté más que caliente. Después de ello se cubre el molde con la masa y se vuelve a introducir en el aceite donde se despegará y se freirá el buñuelo hasta que esté dorado. Finalmente, lo decoras y lo terminas añadiendo el azúcar y la canela para endulzarlo.
