Las miles de bacterias que viven en nuestro aparato digestivo, y que cumplen una función esencial de protección frente a numerosas infecciones, es lo que conocemos como flora intestinal. Y desempeñan otro papel no menos importante en la digestión de ciertos nutrientes esenciales como los hidratos de carbono y en la producción de vitamina K. Y, por si fuera poco, estimulan el sistema inmunológico. Motivos más que sobrados para cuidar la flora intestinal, la cual puede verse dañada por múltiples causas, desde una alimentación desequilibrada al consumo excesivo de laxantes y determinados fármacos. Y otro enemigo declarado de la flora intestinal es el estrés. ¿Qué nos alerta de que nuestra flora intestinal está dañada?, ¿qué podemos hacer para regenerarla?
Una flora intestinal dañada puede provocar síntomas como hinchazón abdominal, estreñimiento o diarrea, aumento de gases o cólicos, entre otros. La dieta es una de las claves para regenerar la flora intestinal. Una dieta en la que no deben faltar estos alimentos.
Prebióticos
Alimentos ricos especialmente en fibra, esencial para regenerar la flora intestinal, especialmente presente en frutas y verduras. Incluye en la dieta alimentos como manzanas, fresas, kiwis, peras, semillas, verduras de hojas verdes, higos.
Probióticos
Los yogures, kéfir o quesos fermentados son ricos en lactobacilus y bifidobacterias, alimentos que contienen ácido láctico y microorganismo vivos. Los probióticos deben acompañar a una dieta rica en verduras para obtener los máximos beneficios.
Antibióticos
Hay alimentos que tienen un efecto antibiótico natural, como los ajos, cebolla, pimienta, canela, jengibre o cúrcuma, que ayudan a proteger la flora intestinal y a mejorar los cuidados del sistema digestivo. Alimentos que favorecen la digestión de las grasas.
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