Invitadas a una boda: Lo que hay que evitar

Invitadas a una boda: Lo que hay que evitar. En el momento en el que recibes una invitación de boda, ya sea de un amigo, un familiar, un compañero de trabajo o un conocido comienzan las dudas. No importa a cuántas bodas hayas ido a lo largo de tu vida, ya que, en el momento de decidir el vestuario, el regalo o, simplemente, el peinado, empiezan a venir preguntas a nuestra cabeza. ¿Debo o no vestir de blanco? ¿Sigo la lista de bodas al pie de la letra o puedo salirme de ella y elegir un regalo por mi cuenta? ¿Debo llegar a la ceremonia antes de la hora marcada en la invitación? Y así podríamos continuar con una lista inmensa de otras cuestiones parecidas.

Seguro que todas estas preguntas te las has hecho, sino una, cien veces, cada vez que tienes que acudir a un acontecimiento de este tipo, pero tranquila, para salir de dudas, aquí te decimos qué tienes que evitar a toda costa en una boda. En ocasiones son detalles que parecen claros pero conviene asegurar y otros que no son tan obvios.

¿Qué debes evitar cuando te invitan a una boda?

El recibir una invitación de boda, por una parte es un motivo de alegría, pero, por otro lado, significa el comienzo de una cadena interminable de resolución de dudas: Qué ponerte, cómo maquillarte y peinarte, qué regalo elegir…
 
Esto es lo que no debes hacer.

• A la hora de elegir tu vestuario, debes intentar no ir vestida del mismo color que la novia. En principio el color blanco queda prohibido, ya que si la novia fuera de otro color, debería avisar de alguna manera a los invitados. Además, hay que seguir el código de vestimenta que hayan puesto los novios en la invitación.
• El regalo. Es otro asunto polémico. Normalmente la pareja habrá hecho una lista de bodas, aunque no tienes por qué ceñirte a ella, sino que puedes escoger algo que sepas que a la pareja le va a gustar. Evita los “regalos originales” porque nunca se sabe cómo van a reaccionar y si quieres regalarles algo distinto y no estás seguro, es mejor que hables con ellos.
• En la celebración, ya sea en una iglesia o en el Ayuntamiento, debes evitar llegar tarde. Es recomendable, incluso, llegar un poco antes para irse colocando y que la ceremonia pueda empezar a su hora.
• Por último es necesario que te abstengas de criticar en una boda. Si el vestido de la novia no te gusta, la comida está mala o el restaurante es horrible, no lo digas. Además de que queda muy descortés, no sabes nunca quién está escuchando.
• Si tienes que hacer un discurso no intentes ponerle un toque picante o hacer bromas fuera de tono, ya que podrían molestar a la novia y estropearle su día.

Si sigues estos consejos te convertirás en una invitada modelo y, a lo largo de toda la celebración no te sentirás en ningún momento fuera de lugar y no tendrás por qué dudar a la hora de actuar como la situación lo requiera.