Te desvelamos todas las claves para escoger los zapatos de novio para bodas formales e informales
En las revistas de moda es habitual ver cómo se vierten ríos de tinta en tan solo uno de los dos protagonistas de la boda: la novia. Y no es para menos. Hace unos días desgranamos los misterios del color blanco en el vestido nupcial. Sin embargo, en muchas ocasiones, los medios especializados parecen olvidarse de que una boda es cosa de dos y el novio queda relegado a un incomprensible segundo plano.
Hoy nos centramos en su figura y. en concreto, también en la presencia de una pieza fundamental del traje, la que siempre está en contacto con el suelo: los zapatos. Una prenda que a priori puede pasar desapercibida, pero que si se escoge correctamente aparecerá con total seguridad en el álbum de fotos del momento. Te contamos qué zapatos elegir y qué factores influyen en la decisión.
En primer lugar, la circunstancia más determinante a la hora de escoger el calzado es, sin duda, el tipo de boda que se va a celebrar. En el caso de tratarse de un enlace formal, el abanico de posibilidades se abre considerablemente. Si se trata de una boda sofisticada y de etiqueta rígida y tradicional, lo habitual son los zapatos estilo Oxford, sofisticados y elegantes e idóneos para bodas con un protocolo estricto e inflexible.
Si la etiqueta concede manga ancha, los zapatos estilo Legate resultan perfectos. Estos zapatos tienen una ornamentación en forma de doble costura que rompe con la sofisticación clásica sin perder un ápice de elegancia.
Finalmente, si el novio cree que el punto fuerte de su traje son los zapatos, es recomendable abogar por un groom style, es decir, un atuendo en el que priman los brillos, ya sean zapatos con lentejuelas o adornos similares o zapatos de charol, lo que les cedería inmediatamente el protagonismo.
¿Y qué hay de las bodas informales?
Si por el contrario, las nupcias presentan un aire más informal, recomendamos unos zapatos con hebillas. Cómodos y de puntera corta resultan ideales para una ceremonia al aire libre.
Además, si el enlace se desarrolla en una atmósfera rural, sería buena idea desempolvar los mocasines o los náuticos. Aunque este tipo de calzado no tenga cabida en una boda tradicional, es muy común su uso en celebraciones al aire libre, pues sus suelas flexibles se adaptan con más facilidad al terreno irregular.