Las pelucas naturales son muy delicadas y costosas, por lo que debemos cuidarlas con la máxima delicadeza posible. Por lo general, muchos profesionales nos ofrecen sus servicios para limpiarlas o incluso nos aconsejan que debemos seguir la misma rutina que con nuestro propio cabello, aunque claro está que hay unos tips a tener en cuenta para hacerlo. Te indicamos cómo lavar las pelucas naturales paso a paso.
1. Desenreda la peluca
Lo primero que has de hacer es cepillar muy bien la peluca para eliminar todos los nudos que pueda tener, especialmente en las largas. Para ello debes tener en cuenta la naturaleza de tu propio pelo a la hora de escoger el cepillo o el peine con el que piensas hacerlo. Por ejemplo, para el pelo liso es recomendable un cepillo, mientras que para el rizado se aconseja un peine de púas.
2. Lávala con un champú apropiado
Llena un recipiente con agua caliente e introduce la peluca con mucho cuidado. En este paso debes utilizar un champú apropiado para el tipo de cabello, ya sea graso, seco o teñido, ya que en caso contrario no obtendremos un resultado óptimo. Lava bien el cabello frotándolo con cuidado y enjuágalo de nuevo con agua caliente hasta eliminar todos los restos de jabón. Cuando ya la tengas, escúrrela con delicadeza.
3. Aplica acondicionador
Una crema suavizante será perfecta para darle a tu peluca el brillo y la vida que tanto necesita. Aplícala y déjala reposar entre 5 y 10 minutos, dependiendo de la recomendación del fabricante. Cuando haya pasado este tiempo, vuelve a enjuagarla en agua caliente. Eso sí, es muy importante que este paso lo realices sólo una vez al mes, ya que aplicar demasiados productos químicos a tu peluca puede acabar estropeándola.
4. Envuélvela en una toalla
Cuando hayas eliminado por completo el acondicionador, escúrrela y envuélvela en una toalla para que absorba toda la humedad. Una vez haya pasado una media hora, sácala de la toalla y déjala secar al natural. Lo mejor es que no utilices secadores ni planchas, ya que se deteriorará más rápidamente.
5. Péinala
Cuando ya esté seca, y para acabar, sólo tendrás que peinarla con mucho detenimiento para que no se suelten cabellos ni aparezcan de nuevo los indeseables nudos. ¡Y listo! Ya sólo tendrás que ponértela y salir a la calle para lucir tu mejor look.
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