Verdades y mentiras de la limpieza de piel. La apariencia y salud de tu piel es muy importante. Para ello debes aplicarte las correspondientes cremas y tratamientos que favorezcan su esplendor. En estos tratamientos deben encontrarse productos pensados para la limpieza de tu piel. Existen muchas opiniones, muchas creencias, en definitiva, muchas verdades y mentiras. A continuación, te ofrecemos toda la verdad acerca de ellos.
Son muchas las opiniones que habrás escuchado acerca de los productos dedicados a la limpieza de tu piel. Sin embargo, a continuación nos encargamos de revelarte algunas cuestiones sobre las que, tal vez, tengas dudas.
Productos para la limpieza de la piel: verdades y mentiras
- Uso de productos limpiadores. Si tu piel se caracteriza por ser especialmente sensible te recomendamos, en ese caso, no abusar de este tipo de productos puesto que pueden irritarla aún más. Por lo tanto, a la hora de comprar productos limpiadores es muy importante que estos sean suaves, contengan elementos calmantes, hayan superado pruebas de tolerancia en pieles sensibles, etc. La fórmula de los productos limpiadores deben contener una fórmula pensada para aplicarse suavemente sin suponer una agresión a la piel. En definitiva, que con la ligera pasada de un algodón se puedan eliminar las impurezas de la piel sin frotar puesto que lo contrario irritaría la piel.
- Aplicación de los tónicos. Tal vez, te preguntes si el uso de tónicos suponen una irritación de la piel. La respuesta es negativa puesto que no todos los tónicos son astringentes o llevan alcohol. Pero, es importante elegir el tipo de tónico más adecuado a tu piel. Si tienes una piel sensible, lo más indicado son las aguas termales puesto que cuentan con elementos calmantes, suavizantes y antiirritantes.
- Uso de exfoliante. Para conseguir una piel más suave es recomendable llevar a cabo la exfoliación una vez por semana. Además, de ello favorecerá la eficacia de las cremas que te aplicas en tus tratamientos de belleza. No obstante, es aconsejable que estas partículas exfoliantes sean firmes para arrastrar las células muertas, pero no agresivas.
- Las toallitas limpiadoras. Su uso es recomendable en momentos puntuales, como una opción rápida. Estas toallitas no contienen muchos elementos limpiadores, contienen más conservantes, hay que provocar mayor fricción para desmaquillar, por lo tanto, la piel se resiente en la misma proporción. Por ello, es más conveniente que uses los productos desmaquillantes habituales que cuidan de tu piel.
- Periodicidad de la limpieza de la piel. Existe la creencia de que tras la limpieza, el manto hidrolipídico desaparece, por lo que la piel debe descansar unas horas antes de aplicar otro tratamiento de belleza. Sin embargo, esta idea solo es aplicable a aquellos jabones que no son productos de limpieza del rostro específicos. Por ello es importante que siempre utilices productos adaptados a tal fin.
- Conveniencia de usar leche desmaquillante en pieles con acné. Si utilizas una leche limpiadora testada como no comedogénica no provoca la aparición de granos. Por lo tanto, en el caso de tener una piel con acné puedes utilizar este tipo de productos con total tranquilidad.
Después de conocer las verdades y mentiras de la limpieza de piel, no te pierdas los siguientes consejos para lucir limpiar tu rostro convenientemente.
