La actriz luce canas en su pelo a la vez que se las ingenia para “hacerlas desaparecer” con este sencillo truco
Las canas siempre han sido un estigma para las mujeres. El pelo es el primero en advertidos de que ya no somos tan jóvenes, pero, lo cierto es que las canas están de moda y cada vez son más las mujeres que las lucen sin miramientos al que dirán. Y quien mejor que las famosas para animar a abrazarlas y quererlas como parte de nosotras.
Hacia los 30 las primeras canas empiezan a asomar. A menudo, el cabello empieza a encanecerse por la zona de las sienes y se extiende por el resto de la cabeza. Para estas primeras apariciones, que dudas si teñir o no, Salma Hayek tiene la solución.
Para la actriz de Hollywood sería sencillo acudir a una peluquería para cubrir las canas. Pero a sus 55 años la artista se muestra muy natural en sus redes sociales llevando los signos de la edad con orgullo. En su última publicación compuesta por varias fotografías aparece sin una pizca de maquillaje, y su pelo recogido con las gafas de sol en forma de diadema dejando a la vista las canas que tiene cercanas a la oreja.
Salma ha mostrado su indiferencia al qué dirán por tener el pelo de color blanco y mostrárselo al mundo. Pero, aún así ha querido dar un consejo en la siguiente fotografía. En ella demuestra como las hace desaparecer en apenas unos segundos.
Hay que tomarse la vida con humor
Su pie de foto no mentía «Aquí va un truco para disimular las canas sin teñirlas«, escribió Salma. Y conseguirlo lo consiguió vaya, aunque quizás no como esperaríamos. El truco no tiene ningún misterio. Tal y como refleja en su siguiente selfie ¡se ha quitado las gafas! Así es, simplemente ha dejado que el resto de su cabellera castaña oscura cubra esos pelitos blancos.
El sentido del humor de la actriz mexicana es infinito. Sin embargo, parte de razón si que tiene con este comentario. Si te dan miedo los tintes por cómo quedará tu pelo, o simplemente no te molestan tanto como para someter a tu cabellera a ese maltrato químico, y del que no podrás abandonar en tu vida, simplemente, ¡no te recojas el pelo con unas gafas de sol!