Ictioterapia: La última técnica para la pedicura

Ictioterapia: La última técnica para la pedicura. Estamos en una época crítica para nuestros pies. Es el momento de quitarnos las botas, los zapatos cerrados y los calcetines para comenzar a presumir de pies usando sandalias, chanclas… Esto, que en principio es una liberación para los pies, puede convertirse en un problema, ya que necesitamos que estén en perfecto estado. Existen numerosos tratamientos para conseguir poner nuestros pies a punto para el verano, aunque no todos funcionan igual de bien. Debido a todos los factores externos a los que están expuestos en verano y a lo importante que es su aspecto, no se deja de innovar nunca en cuanto a tratamientos de pedicura. ¿Quieres saber qué es lo último?

¿Te suena la palabra “ictioterapia”? Si no te suena esta palabra es que no conoces lo último para el tratamiento de los pies, por lo que es ideal para preparar los nuestros para estos meses de verano.

¿Qué es la ictioterapia?

Este novedoso tratamiento para mejorar el aspecto de los pies, tiene como sus grandes protagonistas a unos peces que proceden del continente asiático y que se llaman garra rufa, unos pequeños animalitos a quienes les gusta comer las células muertas y las impurezas que se encuentran en nuestra piel.
 
En la boca tienen ventosas y diminutos dientes con los que los van retirando, provocando un efecto exfoliante con unos resultados muy buenos. El procedimiento sería meter los pies recipientes llenos de estos pequeños peces y dejar que actúen durante quince o veinte minutos en agua caliente.
 
Además, sirve también para la psoriasis, la cicatrización de heridas y mejorar la circulación de la piel y su hidratación. Por si fuera poco, segregan dithranol, una enzima que se emplea en cosmética en la composición de las cremas antiedad.

Posibles riesgos

A pesar de que los resultados son inmejorables, se ha comenzado a alertar de que existen ciertos riesgos para la salud derivados de este procedimiento.
 
En primer lugar, la temperatura del agua. Los 37 grados a los que se encuentra son los adecuados para la supervivencia de los peces y su correcta actividad, pero también permiten la presencia de otros organismos patógenos y la piel está en contacto con ella alrededor de 20 minutos.
 
Pero sobre todo, su gran problema procede de la novedad del tratamiento, que hace que muchos establecimientos no autorizados lo ofrezcan sin estar regulados sus servicios, por lo que es importante acudir a un centro de confianza.
 

Apúntate a lo último para la pedicura, quítate los calcetines y presume de pies luciendo sandalias, la tendencia absoluta en estos meses de verano.