Depresión postvacacional: Consejos para superarla. Descubre la mejor forma de lidiar con este problema y sus síntomas para comenzar de nuevo con mucha más energía y positividad.
Insomnio, ansiedad, estrés e incluso agotamiento y falta de concentración son algunos de los síntomas que acompañan al denominado síndrome postvacacional. El regreso al trabajo y a la rutina diaria después de las vacaciones no siempre nos sienta bien, por lo que es importante no tomarse a las ligeras las señales que nos envía nuestro cuerpo, ya que unos leves síntomas, si no se adoptan medidas, pueden derivar en un problema serio de salud o en una depresión.
Volver al trabajo y a asumir las responsabilidades de la familia y la casa no siempre es fácil, máxime después de haber disfrutado de unas merecidas vacaciones o de unos días de relax para olvidarse de las prisas, los problemas y, sobre todo, del despertador.
En algunos casos, la vuelta, lejos de ser fácil, puede convertirse en un problema de salud que va acompañado de un malestar general. Es lo que se denomina síndrome postvacacional y cuyos síntomas son falta de concentración, inapetencia, insomnio, detrás del que en 7 de cada 10 casos hay depresión, estrés, irritabilidad, ansiedad e incluso cansancio.
Los síntomas del síndrome postvacacional son pasajeros y suelen desaparecer al cabo de varios días o de un semana (dependiendo del tiempo que han durado las vacaciones), pero ¿cómo superarlo?
- De entrada, los expertos aconsejan recuperar nuestro ritmo habitual y nuestras responsabilidades de manera gradual, por ejemplo, regresando de las vacaciones unos días antes para organizar la casa, dejando de dormir la siesta para recuperar los horarios habituales de irse a la cama por la noche, o poniendo el despertador a una hora prudente durante la semana anterior a la vuelta al trabajo. En definitiva, organiza tu agenda para no asumir todas las responsabilidades de golpe.
- Es importante mantener unos hábitos saludables, tanto en el capítulo de la alimentación, no saltándose horarios de comida, o comiendo a las horas recomendables, por ejemplo, como realizando alguna actividad física bien moderada o algo más fuerte, dependiendo de tu forma.
- De la misma manera, es importante reservar tiempo para nuestro ocio y tiempo libre, precisamente lo que más echamos de menos cuando acaban las vacaciones, organizando alguna salida con los amigos o la pareja después del trabajo, dejando tiempo para la lectura, la música o el cine. Planifica tu tiempo libre y no renuncies a realizar alguna actividad que te guste.
- Y lo que es más importante, hay que mantener una actitud positiva y separar el trabajo de la vida familiar o personal, cada cosa tiene su tiempo y su lugar y no puedes llevar a casa problemas laborales y viceversa.
El síndrome postvacacional, si no se trata a tiempo, puede derivar en un problema más serio, como una depresión, de la que hay que conocer los síntomas, por lo que si notas que ese malestar te dura demasiado tiempo, puede ser recomendable visitar a un especialista para que te ayude a superarlo.
Esperamos que con estos pequeños consejos sea mucho más llevadera tu vuelta a la rutina, en menos de lo que esperas llegarán de nuevo días de descanso para disfrutar con los tuyos.