Riesgo de melanoma: ¿De qué color son tus ojos? Y es que el color de nuestros ojos puede ser ser un aliado de primera en la detección de los riesgos de sufrir una enfermedad de la piel. Tener los ojos azules, por ejemplo, nos hace menos vulnerables a padecer vitíligo, caracterizada por la aparición de manchas blancas, mientras que tenerlos marrones podría ser un protector de sufrir el cáncer de piel más agresivo, melanoma. Un interesante hallazgo fruto de la investigación que permite dar un paso importante en la prevención de los trastornos de la piel.
Interesante y curioso hallazgo de los investigadores, en concreto de la Universidad estadounidense de Colorado. En el color de nuestros ojos puede estar una de las claves para determinar el mayor o menor riesgo de sufrir una patología severa de la piel y, entre ellas, el melanoma, enfermedad por la que se forman células cancerosas en los melanocitos (las células encargadas de dar color a la piel). El estudio, publicado en Nuture Genetics, desvela que tener los ojos de color azul nos hace menos vulnerables a desarrollar una enfermedad degenerativa de la piel como el vitíligo, caracterizado por la pérdida de pigmento y caída del cabello. Así se constató en el 27% de los 3.000 diagnósticos de vitíligo analizados por el equipo de investigadores, frente a un 30% de pacientes con los ojos verdes y un 43% marrones. Precisamente, tener los ojos marrones puede convertirse en un protector frente al cáncer de piel más agresivo, el melanoma. Y es que, según el estudio, las personas con ojos marrones tendrían menos probabilidades de desarrollar esta enfermedad.
Aunque el vitíligo y el melanoma puedan resultar dos enfermedades totalmente opuestas, tal y como han corroborado los investigadores, existe una relación entre ellas, y es que ser más vulnerables al vitíligo, como sucede con los pacientes con ojos marrones, al tiempo coincide con un menor riesgo de padecer melanoma.
El estudio no solo constata la relación entre los ojos y las enfermedades de la piel, sino que también ha permitido identificar trece genes nuevos que estarían implicados en el desarrollo del vitíligo, un trastorno de la piel caracterizado por la aparición de manchas blancas. Estas manchas aparecen por la pérdidas de melanocitos, las células responsables de la pigmentación de la piel. Suele ser más frecuente en personas de piel morena y en las zonas de la piel que están más expuestas al sol. Suelen aparecer en manos, brazos, cara, labios y pies, aunque también pueden aparecer alrededor de la boca y los ojos.
El melanoma es un tipo de cáncer de piel que puede desarrollarse en cualquier parte del cuerpo, siendo el sol el principal factor de riesgo. Por su parte, el vitíligo, como han explicado los autores del estudio, es una enfermedad autoinmune en la que las células pigmentarias son atacadas por el sistema inmunológico. Además, el vitíligo puede conllevar otros riesgos para la salud del paciente, ya que aumetnta las posibilidades de padecer diabetes, artritis, lupus o problemas de tiroides.