Plantas curativas: Solución natural a la tortícolis, quemaduras y mareos. Remedios sencillos y prácticos para combatir algunas de las dolencias más comunes. En algunos casos, no solo mitigan los síntomas sino que ayudan a prevenir su aparición. La tortícolis puede ser consecuencia de los golpes de aire, mientras que la causa principal de las quemaduras suele ser la exposición al sol. Por su parte, los mareos pueden ser un auténtico tormento si tenemos que hacer un viaje. ¿Qué plantas o hierbas nos pueden ayudar?
Un golpe de aire puede provocar molestias dolorosas como la tortícolis o dolor de oído. En ocasiones, la exposición al viento y a la luz también pueden enrojecer los ojos. Para la tortícolis, entre las plantas a las que se le atribuyen propiedades curativas, podemos recurrir a la árnica y aplicarla en la zona dolorida (en forma de pomada) con un ligero masaje. También resulta eficaz, por sus propiedades antiinflamatorias, una pomada a base de arpagocito, una raíz que ayuda a combatir el dolor y la inflamación. Ésta última también se puede tomar en forma de gotas, diluidas en agua. La tortícolis se caracteriza por un fuerte dolor al girar la cabeza.
Por su parte, si aparece dolor de oídos, el arpagocito, en forma de gotas, también es un buen aliado para mitigar el dolor. Si el problema está en los ojos, lo más indicado es un colirio a base de eufrasia o manzanilla.
Aceite de hipérico y aloe vera
Las quemaduras y eritemas, caracterizadas por pequeñas manchas rojas, suelen aparecer por exposición al sol, incluso en ocasiones utilizando una crema solar adecuada. Para tratar la piel enrojecida por la exposición solar es útil aplicar aceite de hipérico o una pomada a base de aloe. El aceite de hipérico se obtiene de la maceración de las flores frescas en aceite de oliva y se utiliza para quemaduras y picores. Eso sí, hay que prestar atención a cuándo nos la aplicamos. ES aconsejable hacerlo por la noche o a primera hora de la mañana, ya que esta planta tiene una acción fotosensibilizante, es decir, deja la piel más vulnerable a la luz solar. Antes de exponerte de nuevo al sol, elimina todos los restos de la piel.
El aloe vera en pomada ejerce una acción calmante y cicatrizante. Para que sea efectivo se debe aplicar sobre la zona hasta que los síntomas del dolor remitan.
Melisa para el mareo
Los mareos pueden hacer que un viaje sea un auténtico calvario. Mareos que suelen llegar acompañados de vértigos, vómitos y dolor de cabeza. Para aliviar los síntomas, la melisa, una planta que ayuda a eliminar la sensación de náusea. Para que sea más efectiva, se recomienda tomar en forma de gotas, diluida en agua, y hacerlo el día anterior al viaje y durante el trayecto.
Las plantas con propiedades curativas, bien utilizadas, pueden ser un sustituto o alternativa natural a los medicamentos tradicionales. En este caso, como hemos visto, las plantas nos pueden ayudar a aliviar algunos de los síntomas más molestos de dolencias muy comunes, sobre todo en los meses de verano.