El término cáncer, pese a los incuestionables avances médicos, es indudable que sigue teniendo un enorme impacto emocional. Recibir un diagnóstico de cáncer puede ser difícil de asimilar, tanto para el propio paciente como para los familiares. Sentir miedo, tristeza, impotencia e, incluso, rabia, son emociones normales cuando el cáncer toca de cerca, especialmente cuando se trata de alguien tan cercano como una madre. Respuestas emocionales que no siempre son fáciles de controlar y que pueden terminar pasando factura a la salud psíquica. En estos momentos es importante canalizar las emociones y los pensamientos negativos para servir de apoyo a la persona que nos necesita. Y algo igualmente importante es saber que en estos momentos podemos contar con ayuda profesional que nos brindará, como familiar de la persona diagnosticada de cáncer, a sobrellevar mejor todo el proceso de la enfermedad. Desde la Asociación Española Contra el Cáncer, AECC, por ejemplo, se brinda a los familiares de pacientes diagnosticados de cáncer un servicio gratuito de atención psicológica.
¿Cómo afrontar el proceso oncológico cuando el paciente es alguien tan cercano como una madre? Todos sufrimos, lógicamente, cuando alguien a quien queremos sufre o está enfermo. El diagnóstico del cáncer, y los cuidados que requerirá la persona en función del grado e intensidad del tumor, conllevará cambios en la vida personal, laboral y social de sus familiares, especialmente los más cercanos. Para hacer frente a esta nueva situación -la cual debemos aceptar porque la negación solo nos hará más vulnerables- no debemos rechazar la ayuda y el asesoramiento de los profesionales. Es importante confiar plenamente en los profesionales sanitarios -confianza de la que se debe contagiar el paciente-, y aprender a afrontar las situaciones difíciles. Como guía, vamos a ver a continuación algunos de los consejos que nos pueden servir de ayuda cuando la realidad nos golpea y nos obliga a reconocer estas cuatro palabras: Mi madre tiene cáncer.
Cómo afrontar el diagnóstico
- Es fundamental, no solo al inicio sino en cada una de la fases de la enfermedad, resolver todas las dudas que nos puedan surgir sobre la patología en sí, diagnóstico, tratamiento, cuidados, informes médicos, etcétera.
- Los tratamientos contra el cáncer suelen ser largos, y hay que ir ganando la batalla paso a paso, siendo importante mantener en todo momento una actitud positiva, centrándose en el presente, sin anticipar o desesperarse por acelerar el tratamiento.
- Recabar información sobre los recursos del sistema sanitario, asociaciones, organizaciones o entidades de apoyo a pacientes y familiares que nos puedan ayudar en este proceso oncológico, así como de los servicios o programas dirigidos a pacientes y familiares.
- Recabar información sobre cuidados (alimentación, pautas higiénico-sanitarias…) para mejorar la calidad de vida del paciente.
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