Melanoma: Protege tu piel todo el año. El sol pierde intensidad en la recta final del verano, pero eso no quiere decir que nuestra piel necesite menos protección. Todo lo contrario, tal y como subrayan médicos y expertos debemos seguir aplicando un protector solar, al tiempo que vamos preparándola para el resto del año. El cuidado de nuestra piel es esencial para protegerla de lesiones cutáneas, y eso está en nuestras manos. Un argumento indiscutible: cada año se detectan en nuestro país en torno a 3.600 casos de melanoma.
Se acaba el verano, y aunque el sol poco a poco va perdiendo intensidad, nuestra piel sigue necesitando los mismos cuidados. Es el mensaje de médicos y especialistas que además nos recuerdan que cuidar nuestra piel, prestarle atención, es la mejor forma de evitar y detectar de manera rápida cualquier posible lesión cutánea. Y entre estas lesiones, la más grave, el melanoma, del que se detectan en torno a 3.600 casos al año en nuestro país.
Un dato que, ya de por sí, es suficiente argumento para vigilar nuestra piel y prestarle los cuidados necesarios. Contrariamente a lo que pensamos, no solo en verano nuestra piel está expuesta a los efectos del sol, principal factor de riesgo de alteraciones de la piel si nos exponemos sin la debida protección.
Durante este mes, septiembre, aunque el termómetro nos conceda un respiro, hay que seguir utilizando crema solar y evitar la exposición a las horas centrales del día (entre las 11 y las 16 horas). Una exposición demasiado intensa aumenta el riesgo de quemaduras solares. Y con el final del verano, los expertos también nos recuerdan otros consejos importantes para ir preparando nuestra piel de cara a la próxima estación.
Además, aunque no todos los melanomas se manifiestan en forma de lunares, es aconsejable revisarlos. El ABCD (asimetría, bordes, color y diámetro) de los lunares nos permitirá detectar posibles cambios. Según explican los oncólogos, cuando la lesión cutánea es más bien redonda, la lesión suele ser más benigna que cuando se presenta con bordes espiculados. En cuanto a la tonalidad, la cual suele ser marrón, si varía puede ser indicio de lesión. El diámetro, conviene revisarlos si mide más de 5-6 milímetros. En cualquier caso, ante un cambio o alteración, debemos consultar al médico o dermatólogo.
Es cierto que el número de casos diagnosticados de melanoma ha aumentado en nuestro país, pero también que cada vez somos más conscientes de la importancia de cuidar nuestra piel y de que cada vez prestamos más atención a los consejos médicos. No obstante, no hay que bajar la guardia. Así, después del verano, es momento de aplicar una serie de cuidados específicos, como exfoliar e hidratar la piel para evitar la sequedad y reparar al tiempo los posibles daños de los meses de mayor exposición al sol. Es aconsejable acudir al dermatólogo después del verano para realizar una revisión de nuestra piel y, en el caso de que haya aparecido alguna mancha o lunar nuevo, adelantarse lo máximo posible al diagnóstico.
En el caso del melanoma, la detección precoz se traduce en un 95% de curación. Y un último consejo médico, es mejor optar por las cremas autobronceadores que por los rayos UVA para mantener el bronceado después del verano.