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Por definición, los ganglios linfáticos reactivos hacen referencia a una afección de los ganglios linfáticos. Reactivos porque reaccionan, tanto a los ataques de los virus como de las bacterias, los cuales pueden provocar infección o inflamación. En la mayoría de los casos no se trata de un trastorno grave, siendo generalmente el síntoma de una infección o inflamación en curso. Las dolencias que afectan a los ganglios linfáticos pueden ser de varios tipos, en función de la causa que las provoca, y por tanto requieren de un tratamiento diferente. Vamos a ver, más detenidamente, qué hay detrás de los ganglios linfáticos reactivos. [/multipage]
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1. Los ganglios linfáticos, ¿qué son?
Son los protagonistas del sistema linfático, pequeñas glándulas linfáticas ubicadas a lo largo de la linfa. Se estima que hay unas 600, repartidas a lo largo de todo el cuerpo, sobre todo en las ingles, axilas, abdomen, submandibular y cuello. Los ganglios linfáticos desempeñan una función crucial como filtros del sistema inmunológico, gracias a la acción de los linfocitos que evitan la acción de los microorganismos dañinos. Entre las múltiples causas de los ganglios linfáticos reactivos también se incluyen enfermedades autoinmunes, como la artritis reumatoide o el lupus [/multipage]
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2. Síntomas
El término ganglios linfáticos reactivos indica la capacidad de los ganglios de defenderse ante una situación de peligro potencial. De hecho, pueden aumentar su tamaño debido a las células inmunes presentes en ellos, lo que se denomina linfadenopatía, en la mayoría de los casos vinculada a los procesos inflamatorios en la zona de los ganglios linfáticos. Raramente es síntoma de enfermedad neoplásica. Otro síntoma común es notar sensación de dolor o molestia al tacto. [/multipage]
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3. Causas
Si los glanglios linfáticos aparecen inflamados en la zona de las cervicales, la causa puede ser una infección viral, como la mononucleosis, o bacteriana, como tuberculosis, amigdalitis, micosis o leucemia. El aumento de los ganglios linfáticos submandibulares podría un síntoma de caries, mientras que la de los ganglios linfáticos axilares podría hacer sospechar de un cáncer de mama, toxoplasmosis u otras infecciones. Enfermedades como sífilis, linfomas o tumores en las extremidades inferiores puede causar la reacción de los ganglios linfáticos inguinales. [/multipage]
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4. Diagnóstico y tratamiento
Aunque no hay que subestimar el síntoma de inflamación de los ganglios linfáticos, antes de alarmarse y de preocuparse en exceso hay que consultar con el médico, el único que tendrá la respuesta adecuada. Para una mayor precisión del diagnóstico puede ser necesario realizar un examen de ultrasonido. Antes de aplicar cualquier tratamiento, es fundamental conocer los síntomas y, sobre todo, la causa que provoca los ganglios linfáticos reactivos y, con ello, su inflamación. En función de la causa, el médico será el que determine el tratamiento a seguir. [/multipage]
