38 esenciales florales componen el tratamiento natural de las flores de Bach. Pero, ¿cuándo y cómo funcionan? Las flores de Bach se utilizan tanto restablecer el equilibrio emocional y físico –por ejemplo, ante un problema de timidez-, como para aliviar molestias leves como una quemadura. Sus efectos se basan en la esencia energética de las flores. Se administra generalmente en forma de gotas y no tienen contraindicaciones ni efectos secundarios. Vamos a ver más detenidamente en qué consiste este tratamiento natural y cómo pueden ayudarnos a combatir ciertas patologías o dolencias.
Las flores de Bach son uno de los tratamientos naturales que, pese a que ser descubiertos sus efectos hace décadas, sigue siendo uno de los más desconocidos. El tratamiento con flores de Bach está formado por 38 esenciales florales, una específica para cada emoción. Esencias para recuperar el equilibrio, subir las defensas o aliviar las molestias de algunas enfermedades. Fueron descubiertas a principios del siglo XX (entre 1926 y 1934) por el doctor Edward Bach, de ahí su nombre.
A las flores de Bach se le atribuyen efectos beneficiosos sobre el bienestar físico y emocional. Así, podemos recurrir a ella para aliviar o combatir problemas emocionales –timidez, ansiedad, por ejemplo-, problemas físicos –insomnio, por ejemplo- o las molestias de pequeños accidentes domésticos –una quemadura, por ejemplo-. A diferencia de la fitoterapia o de los tratamientos farmacológicos convencionales que se basan en principios activos, las flores de Bach basan sus propiedades en la esencia energética de las propias flores. Antes de detectar una patología o problema de salud, nuestro cuerpo padece una serie de desequilibrios que se manifiestan a través de los que sentimos, pensamos y cómo actuamos. Estados negativos como la tristeza, impaciencia, ira o desánimo también se manifiestan una vez producida la enfermedad y también pueden ser tratados con las flores de Bach.
¿Cómo se toman?
Por lo general, se administran en forma de gotas El preparado incluye la esencia floral, agua y conservante (generalmente glicerina vegetal o coñac). La mayoría de los tratamientos combinan más de una esencia floral. Las gotas se colocan directamente en la boca y se toman antes, durante o después de las comidas. Se recomienda tomar un mínimo de cuatro dosis al día. También tienen usos tópicos, en cremas, pomadas.
¿Tienen efectos secundarios?
Una de las principales particularidades de este tratamiento es que no tiene contraindicaciones ni efectos adversos. No obstante, las flores de Bach sí pueden despertar o remover ciertos estados de conciencia que nos generen incomodidad, por ejemplo, el darnos cuenta de algo de nosotros mismos que no nos gusta. Por eso es importante que el tratamiento sea prescrito y seguido por un profesional.
Flores de Bach antiestrés
Ansiedad y estrés se pueden combatir con las flores de Bach. La ansiedad suele ir acompañada de un estado de preocupación y aceleración. En estos casos se recomienda tomarla flor Impatiens y White Chestnut. Si padecemos estrés, también va muy bien Elm.
Si nuestro problema es el insomnio por las preocupaciones, la esencia más adecuada es White Chestnut. Si es por responsabilidades y temores asociados, Elm y Mimulus. Por último, Rescue Remedy es una fórmula de cinco esencias preparadas para emergencias (malas noticias, exámenes). Se puede administrar de forma oral, caramelos o crema para uso tópico.