Fibromialgia: ¿Cuál es el perfil del paciente? Mujer de mediana edad, en torno a los 50, pero cuyos primeros síntomas pueden aparecer mucho antes, en torno a los 37 años. Es el perfil tipo de los pacientes diagnosticados de fibromialgia, una patología con rostro femenino ya que las mujeres somos mucho más vulnerables a padecerla, dibujado en el estudio (denominado EPIFFAC) que ha llevado a cabo la Fundación de Afectados y Afectadas de Fibromialgia y Síndrome de Fatiga Crónica.
Ser mujer es, en el caso de la fibromialgia, un factor de riesgo. Somos más vulnerables a padecer una patología cuyos primeros síntomas, según los especialistas, aparecen, de media, en torno a la edad de los 37 años. Pero, ¿cuál es el perfil tipo del paciente con fibromialgia? Es una de las preguntas a las que ha tratado de dar respuesta el estudio realizado por la Fundación de Afectados y Afectadas de Fibromialgia y Síndrome de Fatiga Crónica. Así, según los resultados, el perfil es el de una mujer cuya media de edad se sitúa en torno a los 52 años, casada y con un nivel bajo de estudios.
No obstante, este estudio, además de mostrar el perfil tipo del paciente de una patología que se estima que en nuestro país afecta a más de 900.000 personas y de constatar el importante impacto social y económico que puede tener, incide especialmente en la importancia del diagnóstico, el cual puede llegar a retrasarse hasta siete años. Y no solo se retrasa el diagnóstico certero de la enfermedad, sino que los pacientes reconocen que en, algunos casos, han necesitado consultar a más de 5 médicos o facultativos hasta desvelar la verdadera causa de los síntomas que presentaban.
Más de 300 pacientes han participado en este estudio, en el que como hemos apuntado también se valora el impacto económico de la fibromialgia. Así, un 65% de los pacientes reconoce haber visto reducidos sus ingresos por la pérdida de su puesto laboral, lo que se traduce en una media de unos 700 euros. A esto hay que sumarle que el 70% de los pacientes diagnosticados asegura haber sufrido una disminución de su rendimiento laboral e, incluso, de su capacidad para seguir realizando las tareas cotidianas. Y es que la fibromialgia es una enfermedad que puede llegar a mermar severamente la calidad de vida. Y no solo en el terreno laboral, ya que un 67% de los pacientes asegura tener cierto grado de insatisfacción en sus relaciones de pareja.
El diagnóstico de la fibromialgia es esencial para aplicar el tratamiento más adecuado y ayudar a combatir los síntomas (entre ellos, el dolor, la rigidez de las articulaciones o la fatiga). De hecho, el 93% de los pacientes sigue los tratamientos recomendados por el médico, al igual que también se valora de manera muy positiva el complementar el tratamiento con otras técnicas, como la osteopatía, los masajes y las sesiones de agua.
Pese al impacto de la enfermedad, como constata este estudio recién presentado, más de la mitad de los pacientes considera que la administración no muestra suficiente sensibilidad. De hecho, no todas las comunidades autónomas –a través de sus respectivas consejerías de salud- reconocen esta patología y los problemas asociados que puede conllevar. Esto se traduce en que del 38% de pacientes que asegura haber solicitado el reconocimiento de la minusvalía, tan solo el 23% de ellos ha obtenido algún grado de invalidez con carácter permanente. Y de este porcentaje, la mitad lo logró tras recurrir a la vía judicial.
