Día Mundial del Asma: 7 de cada 10 casos tiene origen alérgico. Un trastorno respiratorio que, según datos de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica, padece entre el 5 y el 10% de la población. Tu puedes contolar tu asma es, un año más y en este 1 de mayo, el lema de un día en el que se quiere concienciar, tanto a pacientes, familiares como a la población en general, sobre un trastorno que se puede controlar con cuidados. El diagnóstico precoz es esencial, especialmente en el caso de niños y adolescentes.
Las alergias están detrás de siete de cada diez casos diagnosticados de asma, tal y como han señalado los médicos y expertos coincidiendo con la celebración del Día Mundial del Asma 2012, bajo el mismo lema desde 2008, Tú puedes controlar tu asma, y con el que se quiere concienciar a la población de los trastornos y consecuencias que puede conllevar padecer asma. Una dolencia o enfernedad respiratoria que afecta, según datos de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (SEAIC) a entre el 5 y el 10 por ciento de la población, con especial prevalencia entre los niños y jóvenes.
En los casos de asma provocados por alergias, el alergéno no solo es capaz de provocar sino de mantener la inflamación bronquial, síntoma característico del asma, y al que suelen acompañar alteraciones oculares y nasales, problemas digestivos, alteraciones de la piel e, incluso, puede causar intolerancia alimenticia.
El Día Mundial del Asma es una iniciativa impulsada por la Global Initiative for Asthma (GINA) para educar e informar a la población, y también a los propios pacientes, sobre una enfermedad crónica que requiere una serie de cuidados pero que, sin un tratamiento adecuado, puede acarrear consecuencias para la salud y mermar la calidad de vida del asmático. Además, según datos médicos, se estima que uno de cada cuatro pacientes no tiene bien controlada su enfermedad.
Entre los factores de riesgo, además de la exposición a alérgenos (incluidos los ácaros del polvo, polen o el pelo de las mascotas), sobre todo en el caso de los más pequeños, también hay que señalar el padecer dermatitis atópica, rinitis alérgica, la exposición pasiva al tabaco o las infecciones respiratorias reiteradas.
El asma es una enfermedad respiratoria crónica, con tendencia hereditaria, y cuya causa es la inflamación de los bronquios. Sus síntomas iniciales son tos seca, sobre todo durante la noche y tras la práctica de un esfuerzo o ejercicio físico, y puede entrañar otras dificultades como rinoconjuntivitis alérgica (inflamación nasal y conjuntival), dificultad para respirar o una especie de pitido o silbido por la boca o nariz. El diagnóstico precoz es esencial para aplicar el tratamiento adecuado, incluso revisar nuestra dieta, y, en caso de no poder evitar el contacto con el alérgeno, se recomienda vacunarse.
