¿Sabías que detrás de la ansiedad puede haber una deficiencia de magnesio? Entre los nutrientes esenciales hay que vigilar la ingesta de minerales tan importantes como el magnesio, y en caso de carencia no subestimar los síntomas. El magnesio, presente en los huesos, entre otras funciones interviene en los impulsos nerviosos, en la formación de proteínas, en la oxigenación de los músculos, en el mantenimiento de los dientes y en el metabolismo energético. A todo esto hay que sumar el efecto protector que ejerce sobre el corazón. Sentir calambres y dolores musculares con frecuencia es una de las primeras señales que nos deben hacer sospechar de que nuestro organismo necesita aumentar la dosis de magnesio. Vamos a ver, más detenidamente, cuáles son las señales que indican la falta de este mineral.
Dolor muscular
Suele ser uno de los primeros síntomas de la deficiencia de magnesio, junto a los calambres, espasmos musculares -que pueden llegar a dificultar el descanso- o los temblores. Al realizar un esfuerzo, la carencia de este mineral puede hacernos más vulnerables a dolores o molestos tirones.
Fatiga
Un síntoma que no debemos subestimar porque delata la carencia de minerales. A través de un análisis, y teniendo en cuenta el resto de síntomas asociados, podremos confirmar si se trata de magnesio. De hecho, puede ser habitual sentirse cansando desde por la mañana, con la sensación de no haber dormido bien.
Lápsus de memoria
¿Últimamente tienes más despistes?, ¿se te olvidan con más frecuencia las cosas? Uno de los motivos puede ser la falta de magnesio, mineral que también influye en la concentración y en la memoria.
Mayor sensibilidad a la luz y al ruido
Si nunca antes te había pasado, puede que tengas falta de magnesio. Uno de los síntomas es precisamente aumentar la sensibilidad a los estímulos visuales y sonoros.
Cambios en el estado de ánimo
Desde irritabilidad, estrés, tensión nerviosa, ansiedad y, en algunos casos, ataques de pánico. Nuestro estado fisico y emocional están irremediablemente unidos, y la carencia de un nutriente importante se manifiesta también en el estado de ánimo.
Dificultades para conciliar el sueño
Lo que se sumará a la fatiga del día siguiente. Si te cuesta conciliar el sueño, y tienes alguno de los síntomas anteriores, no descartes que pueda tratarse de falta de magnesio. El dormir mal, o menos horas de las necesarias, merma nuestras defensas y nos roba energía.
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