Cáncer de mama: Programa pionero para predecir ganglios en las axilas. Una herramienta con capacidad para adelantarse al diagnóstico y que lleva sello español, ya que ha sido desarrollada por el Centro del Cáncer de Mama del Hospital Vall d’Hebron de Barcelona. Una técnica que podría beneficiar a entre un 10-20% de los pacientes diagnosticados de cáncer de mama en sus fases iniciales, uno de los tumores más frecuentes entre las mujeres. La particularidad de esta herramienta es que permite calcular las probabilidades de desarrollar células tumorales en las axilas, en concreto en los ganglios linfáticos.
Una herramienta con capacidad de predecir y, por tanto, con capacidad de aportar valiosa información para adelantarse al diagnóstico. Esto es lo que puede hacer el novedoso software, una herramienta que se ha perfeccionado y cuya función es el análisis molecular del denominado ganglio centinela positivo. Su aplicación, según ha informado el Centro del Cáncer de Mama del Hospital Vall d’Hebrón, podría beneficiar a un porcentaje notable de pacientes, entre un 10 y un 20%. En concreto, este nuevo software supone una interesante herramienta para los profesionales y para ser más certeros aún en su diagnóstico, ya que permite valorar mejorar hasta qué punto es necesaria la extirpación de los ganglios de las axilas en un proceso de tratamiento de cáncer de mama. Una herramienta informativa que no sustituye al criterio medico, sino que lo refuerza.
Para su desarrollo, se ha seguido un estudio multicéntrico, con la participación de 600 pacientes y 8 centros de nuestro país (12 de Octubre de Madrid, Aranua de Vilanova de Lleida, Instituto Valenciano de Oncología, Virgen del Rocío de Sevilla, Hospital Clínico de Salamanca, Complejo Hospitalario de Santiago de Compostela, Doctor Negrín de Gran Canaria y Grupo Cooperativo de Investigación Clínica Solti). A partir del estudio de la carga tumoral de los ganglios centinelas positivos (el valor OSNA, siglas en inglés de one step nucleic acid simplification) se han aplicado los resultados al resto de los ganglios de la axila –vía de salida que utilizan las células tumorales- para predecir sus probabilidades de estar afectados. Tal y como señalan los especialistas, si se detecta que el ganglio centinela está limpio no tendría por qué ser necesaria la extirpación del resto.
Disponer de esta información constituye una importante herramienta para mejorar los tratamientos y reducir su agresividad, sin restar efectividad. De hecho, actualmente en los tratamientos de cáncer de mama cada vez es más frecuente la extirpación del tumor sin necesidad de recurrir a la una mastectomía (extirpación total del pecho). El estudio –a través de esta técnica molecular- de los ganglios linfáticos no solo se centra en una de sus principales vías de salida y, por tanto, de propagación, sino que se centra en uno en particular, el ganglio centinela, el cual se ubica entre el tumor y el resto del cuerpo.
No es la primera vez que los especialistas en este tipo de tumores se habían planteado hasta qué punto es necesario proceder a la extirpación de todos los ganglios de la axila –valorando sobre todo si los resultados afectan a las tasas de supervivencia-. Tal y como apuntan los responsables de esta nueva calculadora, hay un grupo de pacientes con ganglio centinela positivo en los que está suficientemente claro si es necesaria la extirpación total, y es ahí donde esta nueva herramienta puede suponer una importante ayuda.
Esta nueva herramienta, con la que en definitiva se pretende seguir avanzando en la mejora del tratamiento cáncer de mama, ha sido presentada en la última Conferencia del Cáncer de San Antonio, en Estados Unidos y será una de las protagonistas en la próxima celebración de la segunda edición del congreso de la Asociación Española de Cirujanos de Mama, AECIMA, que reunirá en los próximos días (12 y 13 de abril) a más de un centenar de ginecólogos y cirujanos especializados en este tipo de tumor.