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Las técnicas de relajación y los automasajes pueden ayudarnos a mitigar las señales propias de la acumulación de tensiones (mayor irritabilidad, pérdida de concentración, sobrecarga muscular) que, sumadas al estrés y las preocupaciones, nos hacen candidatos idóneos para el molesto dolor de cabeza. Cuando se trata de un dolor pasajero, antes de recurrir al botiquín para mitigar las molestias, podemos aplicar algunos recursos naturales que pueden ser muy efectivos. Los automasajes, en concreto, pueden ser un verdadero alivio para relajarnos y calmar el incipiente dolor de cabeza. En tan solo unos minutos conseguiremos rebajar la tensión. ¿Cómo hacer los automasajes? Vamos a ver tres sencillos masajes. [/multipage]
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1. Automasaje lateral
Nos colocamos de pie, o sentadas con la espalda recta y sin cruzar las piernas. Colocamos los pulgares sobre la cabeza, justo encima de las orejas, y los otros dedos a la altura de las sienes. Realizamos un suave masaje con los dedos siguiendo el sentido de las agujas del reloj. Es importante que el entorno esté en silencio, y si la luz nos molesta, suavizarla e, incluso, apagarla. [/multipage]
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2. Automasaje frontal
En la misma posición que el anterior, colocamos los pulgares y presionamos durante unos segundos en la zona del final de las cejas, mientras con los dedos anulares masajeamos la parte central de la cara, en la zona entre las cejas. Justo ahí se considera que hay un punto estratégico para mitigar la tensión y el dolor de cabeza. [/multipage]
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3. Automasaje cervical
Nos tumbamos en el suelo sobre una alfombra o colchoneta, colocando una pelota pequeña en la parte posterior de la cabeza, encima del cuello. Este sencillo ejercicio consiste en dejar que la pelota se deslice de manera suave por la parte de las cervicales del cuello. [/multipage]
