5 ejercicios de yoga para mejorar la salud visual

¿Sabías que el yoga es una disciplina que también reporta beneficios a tus ojos? La relajación mental y física que nos reporta practicar yoga la podemos hacer extensiva a nuestros ojos, poniendo en práctica unos sencillos ejercicios. Cuidar la salud de nuestros ojos es fundamental, sobre todo si pasamos mucho tiempo realizando esfuerzos visuales, por ejemplo, al trabajar delante de una pantalla de ordenador. No podemos olvidar además que vivimos en plena era digital, rodeados de dispositivos móviles con pantalla, y eso afecta también a nuestros ojos. El yoga relaja y mejora la salud de nuestros ojos. ¿Cómo ponerlo en práctica?

Ejercicios de yoga para los ojos

Lo primero de todo es adoptar la postura correcta, y sobre todo hacerlo en un espacio libre de ruidos y distracciones. Nos sentamos en una silla, o en el suelo sobre un cojín, con la espalda recta y la cabeza mirando al frente. Las manos, colocadas encima de las rodillas.

1. Comenzamos con un ejercicio sencillo que consiste en mover, sin prisa, los ojos hacia arriba y mantener esa posición visual durante unos 4 segundos. Mirar hacia abajo, y hacer lo mismo, mantener unos segundos. Repetir 5 veces con cada ojo. Al finalizar, parpadear varias veces seguidas y cerrar los ojos durante unos segundos para ayudar a su relajación.
2. El siguiente ejercicio consiste en mover los ojos de derecha a izquierda. Repetir 5 veces manteniendo los ojos en cada extremo durante unos segundo. Al igual que en el ejercicio anterior, al finalizar, parpadear rápido varias veces y cerrar los ojos unos segundos.
3. Coge un libro y abre una página al azar. Elige una palabra (a ser posible de más de 5 palabras) y centra la vista en ella, sin mover los ojos. Enfoca la palabra completa y fija su imagen en tu mente. Al fijar detenidamente la vista la palabra se irá volviendo difusa. En este momento, relaja los ojos y muévelos alrededor de la palabra, pestañeando de vez en cuando. Durante unos segundos sigue moviendo los ojos, sin detenerte en nada concreto. A continuación, vuelve a centrar la mirada en la palabra. No solo se verá más clara, sino que la tensión ocular habrá disminuido.
4. Centramos la atención en una pared, como si fuera un folio en blanco, y dibujamos con los ojos una palabra, intentando no mover la cabeza. Es importante que las letras sean grandes. Al finalizar, parpadear varias veces seguidas, cerrar los ojos y relajar unos segundos.
5. Cierra los ojos para relajarte durante unos segundos. A continuación, abre los ojos y centra la atención en un objeto. Se trata de mirar el objeto con los dos ojos, para ello el truco consiste en mirarlo en su conjunto.