Todos somos diferentes, y en esa suma de virtudes y defectos radica nuestra personalidad y nuestra individualidad. Aceptarse a uno mismo no solo es una señal de madurez e inteligencia emocional, sino que es un paso importante para disfrutar de nuestra vida con mayor plenitud y serenidad. Renegar de aquellos rasgos que nos hacen diferentes solo hará que nos convirtamos en alguien que no somos. Toma nota de estos cinco consejos para aprender a aceptarse.
1. Olvidarse del qué dirán
Si te pasas la vida pensando en qué dirán los demás no solo renunciarás a tu verdadera forma de ser, sino que desaprovecharás la oportunidad de tomar tus propias decisiones y de marcar tu camino en la vida. Actuar movidos por el qué dirán nos lleva a estar continuamente fingiendo, y eso puede llevarte a traicionar tus principios.
2. Apostar por ti
Las diferencias nos permiten desarrollar nuestro estilo propio. Si conocemos nuestras fortalezas y debilidades podremos apostar sobre seguro por nosotros mismos. Siendo fiel a uno mismo ganamos en confianza, autoestima y seguridad, y eso nos permite enfrentarnos a las situaciones de la vida con otro estímulo.
3. Evita imitar a los demás
Tratar de imitar o emular a los demás solo hará que gastes energías y no te sientas mejor, porque en el fondo sabes que estás actuando en contra de lo que realmente quieres. Aceptarse tal y como somos nos hará sentirnos más relajados y más seguros.
4. Evita la autocrítica constante
Los errores están para aprender, y está bien reflexionar un momento sobre una reacción o comportamiento determinado, pero sin exagerar ni ser demasiados duros con nosotros mismos.
5. Es imposible agradar a todo el mundo
No es posible caer bien a todo el mundo, esto es importante para no caer en el error de tratar de fingir ser quien no somos solo para ganarnos el aprecio de alguien. La amistad y las relaciones duraderas solo nacen de la sinceridad. No siempre depende de nosotros el agradar a los demás.
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