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¿Sabías que hay alimentos que pueden hacer que olamos mal? En concreto, nuestra piel, incluso nuestro aliento o respiración, pueden jugarnos una mala pasada al ingerir determinados alimentos. Esto es debido a que ciertos componentes de estos alimentos se acumulan en el organismo, o pasan al torrente sanguíneo, y son liberados a través de los poros de la piel, la orina o los pulmones. Un incómodo trastorno que puede verse agravado por estrés, por una alimentación desequilibrada, por el consumo de determinados fármacos o por algunos trastornos de la salud. A continuación, tomamos nota de cuáles son los 10 alimentos que conviene vigilar a la hora de comer, especialmente si ese día tenemos un compromiso laboral o personal importante y no queremos dar una impresión equivocada. [/multipage]
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1. Ajo
No solo es uno de los alimentos que pueden provocar otro olor igual de molesto y desagradable, el mal aliento o halitosis. El ajo contiene sustancias sulforosas que pueden pasar al torrente sanguíneo y a los pulmones y que nuestro organismo puede liberar a través del sudor (poros de la piel) o de la respiración. [/multipage]
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2. Cafeína
Una de las particularidades de la cafeína es que estimula las glándulas sudoríparas, por lo que en situaciones de estrés es mejor evitar su consumo. Además, el café es diurético y, al tomarlo, puede provocar una sensación inmediata de sed, lo que favorece la sequedad bucal. [/multipage]
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3. Bebidas alcohólicas
El consumo de alcohol debe ser moderado por muchas razones, entre ellas, la de evitar el mal olor corporal. Y es que el alcohol, al igual que pasa al torrente sanguíneo, también se cuela a través de los poros de la piel, mezclándose con el sudor. Al consumir alcohol también huele el aliento. [/multipage]
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4. Especias picantes
No solo favorecen el mal aliento, sino el mal olor corporal por los gases sulforosos que se producen durante el proceso de digestión, pudiendo ser eliminados tanto a través de la respiración como de la piel. Un molesto efecto que puede durar hasta 48 horas. [/multipage]
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5. Pescado
La denominada trimetilaminuria (TMAU), más conocida como el síndrome de olor a pescado, es un desorden metabólico (puede ser congénito o adquirido) provocado por un incorrecto funcionamiento de la denominada enzima flavinmooxigenasa, la responsable de la descomposición de determinados compuestos de los alimentos, como la trimetilamina, para que no se acumulen en el cuerpo y se liberen por el aliento, orina o respiración. [/multipage]
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6. Coliflor
La coliflor, así como otras verduras crucíferas como el brócoli, contienen compuestos de azufre que, al ser ingeridos, el organismo puede liberar a través de los poros de la piel. [/multipage]
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7. Azúcar
El azúcar, en su justa medida, ya que abusar de su consumo puede resultar perjudicial para la salud. Uno de los motivos para reducir su consumo es que los azúcares refinados pueden modificar el pH del organismo, además de aumentar la temperatura corporal, lo que hará que se sude más y se genere mal olor corporal. [/multipage]
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8. Carne roja
La carne roja es uno de los alimentos que más tarda en digerir el cuerpo, proceso durante el cual se activan las glándulas sudoríparas. Al digerir los aminoácidos, en los intestinos quedan residuos que pueden ser eliminados a través del sudor, provocando mal olor al mezclarse con las bacterias de la piel. [/multipage]
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9. Embutidos
Al igual que con la carne roja, hay que vigilar especialmente el consumo de embutidos, no solo porque puedan desequilibrar la dieta por las calorías y las grasas, sino porque pueden ser los responsables del mal olor corporal. Al descomponerse durante la digestión, pueden provocar acidez estomacal o gases. [/multipage]
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10. Lácteos
Los lácteos, aunque son un alimento esencial en la dieta por su contenido en calcio, también debe tomarse con moderación si tendemos a padecer halitosis o mal olor corporal. La respuesta estaría en su alto contenido en proteínas que, al descomponerse durante la digestión, producirían sulfuro de hidrógeno. [/multipage]
