Cuando la ruptura trae consigo el riesgo de depresión hay que tener cuidado. No hay necesidad de hacer terapia, la respuesta a todo es el amor. Sería bueno si realmente fuera así, y sería más aceptable y justificable para soportar el dolor de un romance fallido.
Parece que el único antídoto real a la depresión, la ansiedad y la adicción a las drogas o a los medicamentos es el matrimonio, una bendición para la salud mental de hombres y mujeres. Para demostrarlo se ha llevado a cabo un estudio internacional en 15 países por una Universidad de Nueva Zelanda. Para los hombres sin duda es así, pero las mujeres no están muy convencidas.
Si el matrimonio es bueno para la salud, por el contrario, la separación, el divorcio o la viudedad, se asocia con un riesgo significativamente mayor de trastornos mentales. Las mujeres están más expuestas al abuso de medicamentos, alcohol o drogas; los hombres a sufrir depresión.
El estudio, dirigido por la psicóloga clínica Kate Scott de la Universidad de Otago en Wellington, es el primero que se realiza a gran escala (34,493 personas). Hasta ahora, se pensaba que el matrimonio ayudaba más a la salud de los hombres que de las mujeres. Sin embargo, ambos se ven afectados por una separación.
La desventaja de la investigación es que demuestra cómo el final de un matrimonio puede afectar a tu salud. Es más fácil entrar en riesgo de depresión, pero tampoco hay que descuidar la adicción a las drogas, el alcohol y los fármacos.
Y es que, del mismo modo que se dan ataques de pánico antes de la boda o se siente soledad durante el matrimonio, la salud se ve muy resentida cuando se trata de separación, ruptura o divorcio.